Una de las actuaciones principales va a ser implantar una Red de Centros de Referencia Nacional de las 26 familias profesionales. Los centros, que estarán en las distintas Comunidades Autónomas, serán punteros cada uno en su área y promoverán las medidas y los programas de investigación necesarios para atender a las necesidades de los sectores emergentes e innovadores.
Paralelamente se extenderá la Red de Centros integrados de Formación Profesional, donde estudian tanto jóvenes alumnos de FP como trabajadores en Formación para el Empleo, lo que permite al centro mantener elevados estándares de calidad de la enseñanza, al mismo tiempo que está en permanente contacto con la realidad del mercado laboral de su ámbito. También está previsto mejorar las dotaciones tanto de equipamiento como de infraestructuras.
Asimismo, el Gobierno, en colaboración con los interlocutores sociales, agilizará la elaboración de nuevos títulos de Formación Profesional de grado medio y superior, priorizando los relacionados con los sectores emergentes e innovadores de la economía. Se impulsará también el proceso de elaboración de las cualificaciones profesionales y los correspondientes certificados de profesionalidad.
El ministro Corbacho ha hecho hincapié en la necesidad de tener «una Formación Profesional que contribuya en mayor medida a dotar a los trabajadores de las competencias y la cualificación necesarias para mejorar su empleabilidad, en un mercado de trabajo que cada vez se transforma con mayor velocidad».