El blog de Mortimer

La prensa percibe problemas con Zapatero por sobreexposición. Ha estado demasiado tiempo capturando la atención de los ciudadanos y la gente se ha empezado a aburrir de él, a sacarle los defectos que se han percibido mejor con tantas horas de presencia, a pensar que no debe ser para tanto el discurso florido del presidente. A eso Felipe González lo llamaba “morir de éxito”. Lo último que se dice de Zapatero es que está muy delgado y demasiado bien de forma física, que está guapo y elegante, sobre todo para las revistas francesas; más guapo y elegante que sus ministras cuando salieron al principio posando en aquella revista de moda, y ahora el poder les pasa factura, no como al Presidente que se le sigue viendo como un pincel.
En cambio, la mayor parte de la gente que podría votarle tiene sobrepeso u obesidad, e intenta, sin lograrlo, mejorar su estampa gastándose un dineral en potingues y gimnasios. Por eso, tal vez, esa gente guarda un rencor creciente hacia los delgados, hacia quien consigue controlar sus comidas, sus calorías y su aspecto. Y así acaba pensando que los delgados no son de los suyos, no son normales, no les gusta atiborrarse de hamburguesas y helados y luego lamentarlo, ponerse a dieta, y no bajar ni un kilo.
La gente normal está gorda y, por consiguiente, no puede votar a un delgado para que los represente. Hasta ahí está llegando la marea contra Zapatero en los últimos tiempos. Rajoy está un poco gordito. Pero eso tiene una justificación, que además es patriótica, para no mantenerse como un pincel. No se mira tanto a sí mismo, porque lo da todo por centrarse en ti y no dedica un tiempo excesivo a mejorar su estampa, porque los graves problemas de la posibilidad de ser presidente le impiden dedicar tiempo a esos asuntos tan superfluos.
Es decir, Rajoy empieza a parecer un poco más humano que ese Zapatero figurín, pero un poco más también que cualquiera que tenga que votarle. Es uno de los nuestros, pero mejorado, porque nosotros estamos gordos porque no paramos de comer y él lo está por culpa de no cuidarse. ¿Así se vota a uno u otro para presidente? Pues parece que sí, dicen los asesores.

This entry was posted on miércoles, abril 20th, 2011 at 12:07 and is filed under Blog. You can follow any comments to this entry through the RSS 2.0 feed. Both comments and pings are currently closed.