La que fuera la reina indiscutible de la música disco a finales de los años setenta y durante la década de los ochenta recibió santa sepultura este miércoles en una ceremonia privada celebrada en una iglesia de Nashville, Tennessee, (Estados Unidos).
Familiares y amigos diero el último adiós a Donna Summer en la más estricta intimidad en la ciudad en la que vivía desde hace casi dos décadas y donde decidió ampliar su faceta artística decicándose a la pintura.
Según el portal estadounidense TMZ, la familia de la desaparecida cantante tiene previsto que acudirán a la iglesia cerca de mil personas, aunque únicamente se podrá acceder al templo con invitación, evitando así que el funeral se convierta en un acontecimiento mediático.
Recordemos que la ganadora de cinco Premios Grammy, culpable de éxitos tan recordados como Last Dance, Hot Stuff, Bad Girls, She Works Hard for the Money o This Time I Know its for Real, falleció el pasado 17 de mayo en Florida a los 63 años al perder su batalla contra el cáncer de pulmón que sufría.
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