Hace pocos días saltó la noticia de que se estaba preparando la segunda parte de Toro Salvaje con el director argentino Martin Guigui al mando. Martin Scorsese, director de la cinta original que en 1980 protagonizó Robert De Niro, se ha apresurado a desmarcarse de este proyecto.
«No tengo ni idea. Esa es la segunda vez que lo oigo. ¿El director argentino no?», responde Scorsese en una entrevista para la revista GQ en la que dejó claro que, desde su punto de vista, no hay nada más qué contar de esa historia y duda que darle más vueltas al personaje de Jake La Motta, del que ya se ha retratado «su auge, caída y autodestrucción», pueda resultar interesante.
«Ya dijimos lo que teníamos que decir en su momento. En última instancia, al final de Toro Salvaje, el (La Motta/De Niro) se mira al espejo y hasta cierto punto está satisfecho consigo mismo. Ya no pelea, ya no se tortura. Se acabó. Asi que… no sé a dónde quieren ir ahora», afirma.
Scorsese se desvincula totalmente del proyecto y admite no saber qué puede llegar a ser Toro Salvaje II. Una cinta que, según lo poco que ha trascendido por el momento contará, además de con Guigui (Big Finish, Beneath the Darkness) como director, con William Forsythe(Arizona Baby, Érase una vez en América) para encarnar a un ajado La Motta.
Y es que esta continuación de la cinta de Scorsese tiene previsto ser parte secuela, parte precuela de la original por lo que veremos al personaje con el que De Niro se alzó con el Oscar al mejor actor en su versión más vieja y tabién más joven.
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