La cantante británica de soul ha vuelto en plena forma. Parece que su último paso por rehabilitación está siendo efectivo de momento y su regreso a los escenarios el pasado domingo ha resultado un éxito entre público y crítica.
Según informa el diario The Sun, Amy Winehouse hizo una aparición estelar el pasado domingo en el 100 Club de Londres, en el que interpretó siete canciones, entre ellas, Rehab, Black to Black y Valerie, además de algunas novedades.
El domingo fue la primera vez que se pudo ver a Winehouse frente a un micrófono desde la minigira que realizó en latinoamerica a principios de año y que derivó en toda una serie de críticas sobre sus interpretaciones y estado físico.
«Amy estaba en un estado fantástico. Se la veía y sonaba genial. Fue como una de sus antiguas actuaciones», afirma al diario británico uno de los asistentes, que explica cómo la cantante entretuvo a los presentes con algunas bromas y ocurrencias.
Entre el público se pudo ver su madre Janice, a su tía Jane y a su novio Reg Traviss, señala la misma fuente, que asegura que Amy Winehouse no probó el alcohol en toda la noche, ni siquiera, afirman otras fuentes, en el backstage.
«Se ha ido la frágil, volátil e impredecible Amy». La actuación del domingo bien podría ser el calentamiento de la cantante, que a partir de este fin de semana se embarca en una gira europea de 12 fechas, empezando en Serbia.
Recientemente, la revista NME informó de que el tercer álbum de estudio de Winehouse ya está listo, pero que la última entrada en rehabilitación de la estrella del soul retrasó su lanzamiento, por lo que todavía no hay una fecha concreta de publicación.
Amy Winehouse tiene prevista su aparición en varios festivales este verano, incluyendo el BBK Live de Bilbao, cita para la que se espera que esté recuperada, porque de momento no se ha informado de que su rehabilitación vaya a afectar al festival.
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