La selección alemana escribió uno de los capítulos más brillantes de la historia de los Mundiales tras humillar (1-7) a Brasil, en su campeonato y ante su público, gracias a veinte minutos primorosos en la primera mitad que supusieron la humillación de la ‘canarinha’, indolente y sin argumentos ante la exhibición germana.
Alemania fue un rodillo, una máquina perfecta. Fiel a su historia, pero con el fútbol por bandera, el equipo bávaro puso en su sitio a la mezquina Brasil. Descuartizó la apuesta de Scolari y sentenció su presencia en la final, la octava de su historia y la posibilidad de levantar su cuarto entorchado, el primero desde la reunificación. Continue reading »