La admisión por parte del exciclista estadounidense Lance Armstrong del uso de sustancias dopantes durante su carrera podría crear al texano nuevos quebraderos de cabeza legales, aunque la amenaza de ser encarcelado por perjurio ya ha prescrito.
Así, tras la confesión que se hará pública este jueves por parte del americano en el programa de Oprah Winfrey, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos, que abandonó una investigación criminal sobre el de Austin hace dos años sin lograr cargos, podría decidir volver a intentarlo, aunque los expertos lo ven improbable. Continue reading »