Más de una semana después, la última gala de los Oscar sigue dando que hablar. El numerito musical en el que el presentador Seth MacFarlane repasaba los destapes más continúa cosechando críticas entre las estrellas de Hollywood.
Pocos podían prever que una parte concreta de la anatomía femenina sería tan protagonista en la gala de las galas. El polémico vestido de Anne Hathaway y su sus inoportunas costuras abrieron la veda en la alfombra roja. Minutos después, y como si se tratara de una estrategia preparada, el maestro de ceremonias reincidía centrando una de sus primeras actuaciones en los pechos de las actrices.
Las últimas en cargar contra el We Saw Your Boobs con el que el creador de Padre de Familia sorprendió en el tramo inicial de la gala han sido Geena Davis y Jamie Lee Curtis. Curiosamente ninguna de ellas aparecía en el repaso a los pechos mostrados en la gran pantalla que hizo MacFarlane.
En un artículo de opinión en el Huffington Post Jamie Lee Curtis califica el número del maestro de ceremonias de los Oscar de «vodevil cursi». Y eso es lo más amigable que le dedica al director de Ted, del que dice le es familiar por sus «chistes crueles y baratos».
«Como miembro de la Academia, como hija de miembros de la Academia y como mujer me esperaba más de lo que la industria del cine tiene que ofrecer. Los Oscar consisten en honrar el arte y los artistas», afirma Lee Curtis que se pregunta «a qué precio» quiere la Academia y los organizadores aumentar la audiencia de la gala.
«¿Qué pasaría si los actores y actrices dejaran de asistir a los Oscar porque lo consideran una coto abierto para ridiculizarles y parodiarles? ¿Sería la Academia tan arrogante entonces?», se pregunta la actriz de 54 años. «Odio hablar de esto pero lo que queda de la gala es la falta de clase de Seth y de sus burlas de un niño de 14 años sobre una de las partes más bellas y maternales del cuerpo de la mujer», sentencia Lee Curtis.
Otra que se ha despachado a gusto con MacFarlane ha sido Geena Davis. Para la ganadora del Oscar por Thelma & Louise el número musical del maestro de ceremonias fue «una falta de respeto» a las mujeres en general y a las premiadas y nominadas en particular.
Davis, presidenta de la Comisión sobre la Condición Jurídica y Social de la Mujer y las Niñas y fundadora de una organización sin fines de lucro que promueve la igualdad de género en los medios de comunicación, señaló que lo ocurrido en los Oscar «ilustra cómo de sordos todavía podemos permanecer con respecto a la condición de la mujer».
La semana pasada, dos políticos estatales femeninas enviaron una carta a la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas pidiéndole que condenara públicamente las bromas MacFarlane sobre las escenas e desnudos de las actrices ya que fue algo degradante para las mujeres.
LA ACADEMIA DEFIENDE A MACFARLANE
La Academia replicó con un comunicado en el que defendía la «libertad creativa» de la gala y sus participantes. «Si los Oscar tratan de algo es de la libertad creativa. Creemos que los productores del programa Craig Zadan y Neil Meron, y el presentador Seth MacFarlane hicieron un gran trabajo y esperamos que nuestro públicco en todo el mundo encontrará el espectáculo entretenido», rezaba el comunicado.
Otra que se ha mostrado disconforme con el número de MacFarlane ha sido Jane Fonda, aunque ella parece que se lo toma con mejor humor y solo pide igualdad para unos y para otros. «Lo que realmente no me gustó fue la canción y el número de baile de las actrices a las que hemos visto los pechos. Estoy de acuerdo con quien dice, si vamos a rebajarnos a eso… ¿por qué no una lista de todos los penes que hemos visto?», escribió en su blog la actriz de 75 años.
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