Feliz Día Mundial de la Fotografía

Es complicado entender información sin fotografía en el mundo en el que vivimos. También, de un tiempo a esta parte, la fotografía se ha convertido en una pieza fundamental del sector de la tecnología de consumo, con cámaras, móviles, aplicaciones y servicios web. Por eso se merece un homenaje y un Día Mundial.

Por otro lado, con motivo de la celebración del Día Internacional de la Fotografía, Portaltic lucirá el 19 de agosto una maquetación especial en la portada, dando todo el protagonismo a las fotografías en cada una de las noticias, sin entradilla y con titulares lo más breves posible.

El 19 de agosto se celebra el Día Mundial de la Fotografía. ¿Por qué ese día? Porque fue un 19 de agosto de 1839 cuando se hizo público que se había inventado la fotografía en París. La cámara oscura llevó a los equipos de película y estos a las más recientes cámaras digitales y sus sensores.

La fotografía puede ser un gran recurso artístico y cada día es más popular entre el hombre de a pie pero es imposible olvidar el servicio que ha prestado y presta a la sociedad de la información. No solo por ser las imágenes capaces de plasmar la realidad sino porque también son capaces de impregnar de sentimientos un instante. «Una imagen vale más que mil palabras», dice el dicho popular.

Gracias a las imágenes del hombre parado frente a los tanques en la plaza de Tiananmenn o el beso en Times Square del marinero y la enfermera, los recuerdos de la revuelta en China o el fin de la II Guerra Mundial son más reales, más sentidos y más humanos.

Al margen del buen hacer del fotógrafo una vez que el dispositivo está en su mano… la fotografía, por supuesto, siempre ha sido tecnología. Y en los últimos años ha entrado en el mercado de consumo como un caballo desbocado. Como siempre ocurre, los avances tecnológicos han conseguido democratizar, en este caso, la fotografía.

La tecnología de consumo ha «atacado» al usuario con la fotografía por todos los frentes posibles, ya sean con las cada vez más asequibles cámaras reflex digitales, los cada vez más versátiles móviles o los emergentes servicios de intercambio de fotos.

Gracias a los bajos precios que están ofreciendo marcas como Sony, Canon o Nikkon, cada vez es más habitual que el usuario medio tenga una cámara réflex digital que es capaz de utilizar con unas pocas nociones. Con ellas es posible jugar y conseguir unos resultados y una calidad que con las compactas era imposible hace unos años.

Por otro lado, las aplicaciones de fotografía han sido un auténtico ‘boom’ en las tiendas de descarga de los ‘smartphones’ y es habitual encontrarlas en los ‘top’ de aplicaciones más bajadas. Con ellas es posible imitar el resultado de una cámara antigua, hacer panorámicas o editar sobre la marcha. Su éxito es la prueba de que millones de personas tienen un fotógrafo dentro que están deseando sacar. Los sistemas con más opciones son los más populares: iOS y Android.

La fotografía es algo tan natural y que gusta tanto que incluso los videojuegos se han atrevido a simular la vida de un fotógrafo. Títulos como ‘Afrika’ o ‘Pokémon Snap’ han centrado su desarrollo en una cámara pero también hay otros muchos que la han incluído como un compañero más en el desarrollo.

Por último, también han proliferado en los últimos años los servicios de intercambio de fotografías en Internet. Cada vez ofrecen precios más competitivos y mejores condiciones, aunque no lo tienen sencillo… Lo cierto es que su uso, al menos en las modalidades de pago, está aún lejos de ser muy popular.

El motivo es que existe la alternativa de las redes sociales. Facebook, por ejemplo, permite subir fotografías -ya en alta definición- sin restricciones y sin coste alguno, que se comparten con cientos de contactos ya establecidos.

Facebook también ha conseguido que subamos una foto al instante de lo que estamos haciendo y que nuestros amigos la comenten. Que compartamos en tiempo real el recorrido de un viaje, que digamos lo que estamos comiendo o cuál es nuestro primer regalo de cumpleaños. Eso casi está acabando con el «te vienes a casa y te enseño las fotos de nuestro viaje a…». La última prueba de que la apuesta del sector tecnológico por la fotografía es todo parabienes.

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