El ministro sirio de Asuntos Exteriores, Walid al Mualem, ha asegurado en Moscú que el Ejército de su país ya ha empezado a retirarse de algunas ciudades en cumplimiento del plan de paz propuesto por el mediador internacional, Kofi Annan, cuyo plazo de aplicación vence este mismo martes. No obstante, ha reclamado que sea Kofi Annan, y no los terroristas, quien garantice a Damasco el cumplimiento del alto el fuego por parte de los rebeldes.
«Hemos retirado algunas unidades del Ejército de algunas provincias en cumplimiento del párrafo C del plan de Kofi Annan, y hemos permitido la entrada en Siria de más de 28 medios de comunicación desde el 25 marzo, después de haber aceptado este plan» del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe, declaró Al Mualem durante una rueda de prensa conjunta con su homólogo ruso, Sergei Lavrov.
«Hemos liberado a numerosos detenidos que habían sido capturados a causa de los disturbios que habían cometido», prosiguió. «A pesar de todos los pasos positivos del Gobierno sirio, hemos constatado un aumento de las operaciones militares por parte de los grupos armados y su expansión a otras provincias», lamentó el ministro.
En cuanto a las garantías de alto el fuego por parte de los rebeldes, Al Mualem fue categórico: «Nosotros no pedimos garantías a los grupos terroristas, que están matando, secuestrando y destruyendo infraestructuras». «Queremos que sea Annan quien nos dé esas garantías», aseveró el ministro, quien añadió que el propio enviado especial le había asegurado personalmente, en una reciente entrevista telefónica, que la tregua sería seguida de un desarme de los rebeldes.
Al Mualem pidió también en la capital rusa que el fin de la violencia sea «simultáneo con la llegada al país de la misión de observadores internacionales» encargada de supervisar el alto el fuego, y advirtió en este sentido de que Damasco quiere tener algo que decir en cuanto a la composición de esta misión.
«MÁS ACTIVOS»
Por su parte, Lavrov precisó que había «transmitido» a su «colega sirio» la necesidad de que las acciones de Damasco sean «más activas» en cuanto al cumplimiento de los puntos del plan y aseguró que Walid al Mualem le había prometido personalmente que Siria cumpliría el plan de Annan y que, de hecho, el régimen ya había empezado a aplicar las disposiciones relativas al «uso de las armas» en las ciudades y pueblos.
«Queremos destacar que el Gobierno sirio nos ha reafirmado sus compromisos y que hemos sido informados por los representantes sirios en lo que respecta a su uso de las armas y del armamento pesado en las ciudades», explicó en la rueda de prensa. «Pensamos que esas acciones deberían ser más decisivas en cuanto al cumplimiento de los puntos del plan de paz», agregó.
Aparte, Lavrov recordó la necesidad de que los grupos armados opositores cumplan su parte correspondiente del plan de Annan y, en este sentido, instó a los Estados extranjeros con influencia en los grupos opositores sirios a hacer uso de ella para promover la aplicación del alto el fuego por parte de los rebeldes.
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