El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha subrayado este lunes que sigue teniendo una situación de amistad con el ‘número dos’ de la formación, Íñigo Errejón, y ha destacado que a veces las discrepancias que puedan surgir dentro de un partido pueden aportar madurez.
«Seguimos jugando al fútbol, a lo que haga falta, hombro con hombro y ya verás como nos va a ir muy bien. A veces pues tener algún problema, alguna discusión, es una cosa que refuerza y da madurez», ha señalado Pablo Iglesias en declaraciones a ‘El Hormiguero’ de Antena 3 recogidas por Europa Press.
«Para nosotros la amistad en Podemos siempre ha sido fundamental, pero es verdad que nosotros al principio montamos el partido siendo un grupo de amigos y montamos una cosa tan grande que eso tiene que estar por encima de la amistad. Tiene que haber una lealtad entre nosotros que vaya más allá de eso, como en un equipo de fútbol, como en una empresa, y más allá de eso yo creo que la amistad es algo que se conserva en Podemos y que no se rompe», ha subrayado.
BESO A DOMÉNECH
En un tono humorístico, el ‘número dos de Podemos, en un vídeo grabado con motivo de la intervención de Iglesias en el programa, ha bromeado que la relación entre ambos dirigentes de la formación morada irá bien siempre y cuando el líder de Podemos no le dé un ‘pico’ como en su día hizo con el líder de EnComúPodem, Xavier Domènech.
En su mensaje, Errejón ha enviado un «abrazo» a su jefe de filas como el que se dieron «tras las europeas», en las que la formación logró cinco eurodiputados contra el pronóstico de las encuestas, que le otorgaban entre uno y dos.
Así, Iglesias ha explicado que hoy mismo ha hablado con Errejón para departir sobre la postura del partido tras desvelarse los denominados ‘papeles de Panamá’ y la petición de explicaciones en el Congreso al ministro de Economía, Cristóbal Montoro.
También con un tono irónico, ha negado que el secretario de Política de Podemos esté más triste desde el cese de Sergio Pascual como secretario de Organización de la formación morada: «Íñigo es sobrio y serio por naturaleza; la sonrisa y la parte más desenfadada me toca ponerla a mí».
«La ilusión que tenemos por cambiar este país nos va a llevar en volandas a conseguirlo, o bien con un gobierno, que es lo que vamos a trabajar en los próximos días, o si tiene que haber elecciones pues intentaremos ganarlas», ha zanjado.