El presidente de Siria, Bashar al Assad, se encuentra en la ciudad costera de Latakia preparando la respuesta al atentado del miércoles contra la sede de la Seguridad Nacional en Damasco, que causó la muerte de tres de sus principales lugartenientes, según informaron este jueves fuentes opositoras y diplomáticas occidentales.
Al Assad, que no ha aparecido todavía en público desde el atentado, está comandando las operaciones del Gobierno, añadieron las mismas fuentes. De momento se desconoce si el presidente viajó a esta ciudad del Mediterráneo antes o después del atentado.
MEDIA VICTORIA
El Ejército Libre Sirio (ELS) ha considerado que el atentado perpetrado este miércoles en Damasco, cuya autoría ha reivindicado, es «media victoria» sobre el Gobierno de Bashar al Assad, al tiempo que ha adelantado que no buscará la otra media.
«Lo que ha pasado hoy (miércoles) en Damasco es media victoria», ha dicho el coordinador militar del ELS Ahmed Kassem. «Pero eso no significa que estemos esperando la otra mitad», ha matizado, en declaraciones a la cadena Al Yazira.
Además, Kassem, que ha hablado desde Estambul, ha aclarado que el ELS no ha necesitado la ayuda de ningún país extranjero, rechazando con ello las acusaciones del Gobierno sirio, que asegura que Arabia Saudí, Qatar y Turquía, entre otros, están apoyando con armas y financiación a la oposición.
«Hay muchos batallones (del ELS) trabajando sobre el terreno dentro de Siria y estamos coordinándonos con ellos», ha informado, al tiempo que ha subrayado que «los planes de futuros ataques dependen de los revolucionarios que están en Siria».
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