El Celta de Vigo ha derrotado al Zaragoza en Balaídos (2-1), en el partido correspondiente a la trigésimo segunda jornada de la Liga BBVA, una victoria forjada en el descuento gracias al tanto de Mario Bermejo, que sirve de oxígeno a los gallegos, pero que hunde un poco más a un conjunto maño que aún no conoce el triunfo en 2013.
En un duelo por la permanencia, pronto se verían sobre el verde las urgencias y, aunque fue el Celta quien pareció tomar el pulso del partido primero, el Zaragoza respondía con peligro a la contra. Emparejado el duelo, la sensación en Balaídos era que el gol podía llegar para cualquier lado.
Así, Varas salvaba el gol de los maños tras un disparo de Pintér y, cuando llegó el turno del Celta, Roberto despejaba un tiro de Álex López, quien aprovechó un error de Sapunaru dentro del área. Sin embargo, enmendando su error, el lateral rumano fue el encargado de abrir el marcador.
Tras un preciso saque de falta de Apoño al segundo palo, Sapunaru ponía por delante al Zaragoza. Tras el mazazo, el Celta continuó con su plan inicial y,dueños de la posesión y de gran parte de las ocasiones, el equipo gallego lograba el empate en un nuevo fallo atrás del Zaragoza.
Álex López, el mejor de los suyos, remataba dentro del área un centro de Augusto que Roberto sólo pudo despejar con el balón ya dentro de la portería. Impulsados por el gol, los gallegos parecían volver a despertar mientras que el empate no hizo otra cosa que hundir al Zaragoza.
Desparecido, el descanso tampoco pareció reanimar a los de Jiménez, que comenzaron la segunda mitad sufriendo, pero que lograban mantener el empate a duras penas hasta hacer llegar el descuento.
Cuando parecía que el partido moriría en empate, de nuevo la defensa del Zaragoza quedaba en evidencia cuando un centro blandito desde la izquierda de Orellana se paseaba por el área de Roberto ante la pasividad de los centrales y, con un defectuoso disparo, Bermejo hacía el tanto de la victoria gallega en el 93.
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