El piloto español Marc Márquez reconoció que está con «ganas» de volver a un circuito y que ya tiene la vista «casi al cien por cien», por lo que espera regresar a los entrenamientos en un corto periodo de plazo después de haberse visto obligado a causar baja también en Jerez de la Frontera.
«Estoy contento, porque después de la operación he notado bastante mejoría. Puedo hacer motocross y eso es buena señal. Me siento más seguro y tengo la vista casi al cien por cien, cada semana veo mejor y eso es importante. Me encuentro cómodo para entrar en una pista, que es de lo que tengo ganas», aseguró en declaraciones facilitadas por su equipo.
Aunque sabe que debe tomarse «con calma» su recuperación, no quiere paralizar su puesta a punto. «Me voy preparando físicamente, hago mucho gimnasio y mucha bicicleta, para poder empezar bien la pretemporada», apuntó.
Así, el vigente subcampeón del mundo de Moto2 está ultimando su puesta a punto con su fisioterapeuta, lejos de los circuitos de velocidad, pero haciendo motocross, mountain bike e intensas sesiones en el gimnasio. En el Circuito Municipal del Segre, situado a tres kilómetros de la ciudad de Lleida, Márquez se entrena en este intervalo invernal, mientras espera para pilotar de nuevo su Moto2.
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