El director deportivo del FC Barcelona, Andoni Zubizarreta, ha asegurado que la Liga BBVA está muy difícil tras la derrota en el Reyno de Navarra y los diez puntos de diferencia con los que cuenta el Real Madrid al ganar al Levante, si bien no dejarán de competir por revalidar el título.
«La liga está muy difícil, es obvio que no depende de nosotros ni del partido que juguemos contra el Madrid. Tenemos que hacer nuestras cosas, hacer nuestros puntos y, con eso, luego evidentemente esperar. Difícil es, el objetivo es complejo, pero no por eso vamos a dejar de competir en cada partido», manifestó antes de viajar a Leverkusen para el partido de ‘Champions’.
Zubizarreta aseguró que los blaugranas hacen «autocrítica» constantemente y negó que sean o vayan a ser «autocomplacientes». «No hemos encontrado mejores soluciones y por eso estamos donde estamos. Si hay cualquier oportunidad de ser primeros, que estemos ahí para aprovecharlo», espetó.
«Competimos muy bien con los jugadores, no he dicho jugar, porque en la primera parte no estuvimos bien, en la segunda jugamos mucho mejor. Hasta el último segundo intentamos ganar, no lo hicimos. Nadie se deja ganar por propia voluntad. Sacamos el mejor equipo para el partido, quisimos ganar en todo momento, pero no nos llegó», apuntó sobre el 3-2 encajado ante Osasuna.
De momento, la Liga queda aparcada por el regreso de la Liga de Campeones, y es que este martes juegan la ida de octavos de final ante el Bayer Leverkusen. «A ver si podemos recuperar sensaciones en Leverkusen y jugar nuestro juego. Estamos preparados para reprogramarnos en cada competición», espeto.
«Si consideramos que estamos en la final de Copa, que ganamos la ‘Champions’ y que ya hemos ganado los tres títulos anteriores, la sensación es que la temporada sería extraordinaria. De todos modos, no por ello renunciamos a la Liga», explicó sobre un hipotético final de año. «Más frío o viento del que hizo en Pamplona no va a hacer. Si lo hace y está peor intentaremos adaptarnos y ganar el partido», apuntó.
En cuanto a la renovación de Pep Guardiola y si ello sería un bálsamo para el barcelonismo y una motivación para el vestuario, pidió calma. «Creo que mi sensación es ver qué cosas puedo hacer para que pueda suceder, y cada uno de los que estamos en el equipo mira por su trabajo. Démosle tiempo», manifestó.
El director deportivo blaugrana se mostró también ambiguo en cuanto a la sede de la final de Copa del Rey que jugarán en mayo ante el Athletic Club de Bilbao, en la reedición de 2009 cuando los catalanes ganaron cómodamente (1-4).
«Es la RFEF la que tiene que designar, escuchar a los equipos y medir la dimensión de una final de Copa del Rey, si el campo neutral es importante o no, si la capacidad es más o menos importante. A partir de ahí, de esa reunión, sacaremos el mejor campo posible para una final que creo que será apasionante, como siempre en Copa. Que encontremos el mejor sitio y una vez lo definamos que nos digan la hora y nos prepararemos», espetó.
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