El presidente del GBB del PNV, Joseba Egibar, ha advertido a ETA de que si está esperando a verificar su desarme o a «darle autenticidad con una foto en la que esté sentado al otro lado de la mesa el Gobierno español», éste no lo va a estar. Asimismo, ha subrayado que «hay mucha gente de la izquierda abertzale» que no entiende «a qué espera ETA» para proceder a entregar las armas, algo que él ha atribuido a una cuestión de «orgullo colectivo».
En declaraciones a Onda Vasca, recogidas por Europa Press, el dirigente jeltzale ha valorado asimismo la «Propuesta de procedimiento para un desarme rápido, viable y efectivo» de ETA hecha pública por el Gobierno vasco este domingo.
Tras recordar que han transcurrido «casi 40 meses» desde que la organización terrorista anunciara el cese definitivo de la actividad armada, Egibar ha subrayado que, aunque «pensábamos que debía producirse implicación del Gobierno español», es conocida la posición política de éste.
Asimismo, ha calificado de «insuficiente» la «puesta en escena por parte de los verificadores» y, por ello, ha defendido que «transcurrido un tiempo más que razonable», el Gobierno vasco «y el PNV han tratado de promover sobre bases ciertas un desarme rápido que se pudiera verificar».
«Si el Gobierno español no se sentaba al otro lado de la mesa ni quería participar directa o indirectamente en el proceso de verificación creemos que es posible y sería determinante que las instituciones vascas plantearan una iniciativa», ha remarcado.
A su juicio, un no desarme tiene unas «consecuencias» para la sociedad vasca, ya que «supone una hipoteca, un lastre que condiciona la política y a la propia izquierda abertzale».
«La IA, lejos de tomar el liderazgo político del conjunto de la izquierda abertzale ve condicionados sus pasos y pronunciamientos a la existencia todavía de ETA. Si no se inicia un protocolo de desarme se condiciona también al colectivo de presos», ha indicado, para añadir que «hay mucha gente de la izquierda abertzale que tampoco entiende a qué espera ETA» porque «si abandona las armas para qué las quieres».
En este sentido, ha considerado que el no desarme de ETA es una cuestión de «orgullo colectivo» porque arrastran una historia y la cuestión es «como cierran una organización en la que la actividad armada ha dejado de ser una realidad».
«Si estás esperando a verificarlo o darle autenticidad con una foto en la que esté sentado al otro lado de la mesa el Gobierno español pues no lo va a estar, porque ya te lo ha dicho. Es verdad que ETA tiempo atrás negociaba con distintos gobiernos en distintos países, pero después, paradójicamente, nadie se sienta al otro lado», ha valorado, para añadir que ETA «debe ser consciente de ello».
PASOS A REALIZAR
Respecto a los pasos a seguir, Egibar ha considerado que la iniciativa política debe ir en la línea de «derogar la excepcionalidad que planea sobre la cuestión penitenciaria».
«La existencia de ETA permitió de forma injustificada que PSOE y PP diseñaran una política penitenciaria de lucha contra el terrorismo. Esa excepcionalidad en la legislación debe desaparecer», ha incidido.
Por otro lado, Egibar ha recordado que los presos de ETA anunciaron hace un año que reconocían el daño causado y se acogerían a «iniciativas que ofrece la actual legislación» y ha destacado que, «en esa línea», el Gobierno vasco está «posibilitando itinerarios personales que se pueden verificar y medir» y que «situarían al preso en un escenario de certidumbre».
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