El delantero del Valencia Roberto Soldado rescató un punto de penalti para el equipo de Emery a falta de cuatro minutos para acabar el choque contra el Chelsea y dejar el empate a uno en el marcador en la segunda jornada de la Liga de Campeones.
El conjunto inglés se adelantó con un gol de Lampard en el arranque de la segunda mitad, pero el Valencia tiró de orgullo hasta el final para lograr una igualada que sabe a victoria después de como se había puesto el partido y la clasificación del grupo. Anelka a punto estuvo de darle la victoria al Chelsea en el minuto 90, pero Diego Alves, el mejor del partido, le sacó el balón con lo pies.
Emery afrontó el encuentro de la misma forma que contra el Barcelona y colocó a Mathieu como interior zurdo. Sin embargo, el Chelsea no juega como el equipo de Guardiola y Bosingwa, el lateral derecho del conjunto inglés, apenas subió la banda. El Valencia desperdició la posibilidad de tener más mordiente ofensiva por la izquierda, ya que Mathieu tiró de músculo, pero le faltó más visión de juego.
La primera mitad estuvo muy igualada entre dos equipos que se tuvieron mucho respeto. Emery y Villas-Boas parecían no querer romper su reciente amistad y ninguno de los dos forzó la máquina para tratar de apabullar al otro. Quizás el Valencia jugó con las líneas más adelantadas y presionó la salida del balón del Chelsea.
El Chelsea, por momento, incluso llegó a racanear con el cronómetro, como si diera por bueno el empate. El conjunto londinense, cuando tuvo el balón, no aplicó un ritmo alto de juego. La circulación del balón fue más bien pausada y tan solo cuando vieron alguna posibilidad de buscar la espalda a la defensa del Valencia, se lanzó a la carrera.
El conjunto local, con Diego Alves como portero ‘Champions’ en lugar de Guaita fue de menos a más en tareas defensivas. Nada más comenzar dos errores infantiles, uno de Albelda y otro de Éver a punto estuvieron de costarle un disgusto al equipo. Tras esos pequeños sobresaltos, Víctor Ruiz y Rami cerraron filas y la zaga se mostró más compacta.
Por parte local, el hombre más incisivo en el ataque fue Canales. El cántabro se ofreció una y otra vez a la hora de hilvanar jugadas de ataque, pero no encontró con quien asociarse. Soldado bastante tenía con zafarse de Terry y David Luiz. Por su parte, los españoles del Chelsea, Torres y Mata pasaron bastante desapercibidos. El burgalés quiso tener algo de protagonismo pero jugando por banda derecha se diluyó su potencial.
BUEN ARRANQUE DEL CHELSEA
La segunda parte empezó de forma animada. En el minuto 50 Torres cabeceó un centro desde la izquierda y Diego Alves metió la manopla para sacar el balón casi en la línea. A la jugada siguiente le tocó el turno al Valencia y un centro desde la derecha no lo pudo rematar Soldado cuando estaba solo y con el portero batido.
El Chelsea se vino arriba, pero ahí emergió la figura de Diego Alves. El brasileño solventó con éxito un mano a mano con Ramires, y a renglón seguido le sacó otro remate a Torres. El cancerbero valencianista tuvo tres intervenciones estelares. Ante la que no pudo hacer nada fue con un lanzamiento de Lampard en el segundo palo. El centrocampista inglés recibió un centro desde la derecha y remató solo ante la pasividad de la defensa valencianista.
El equipo de Villas-Boas siguió a lo suyo después de marcar el gol, mientras que el Valencia dio un paso al frente pero sin mucha convicción. Los de Emery se estrellaron una y otra vez contra el centro de la defensa rival. Apenas jugaron por las bandas y los Terry y David Luiz se sintieron muy cómodos defendiendo por el centro.
En el minuto 70 Piatti puso a prueba a Cech con un tiro cruzado con la derecha que el espigado portero acertó a desviar a córner. Emery hizo un doble cambio y dio entrada a Feghouli y a Jonas para buscar aire fresco en el ataque. Canales pasó a ser el cerebro del equipo, después de que Éver abandonara el campo.
El Valencia lo intentó todo, pero no pudo superar a un Chelsea bien plantado. Además los locales se mostraron fallones de cara a portería. Sin embargo, ahí llegó Roberto Soldado para rescatar al equipo. El delantero transformó un penalti cometido por Kalou a cuatro minutos del final cuando el Chelsea ya saboreaba el triunfo. Diego Alves aún tuvo tiempo de volver a lucirse en el minuto 90 al sacarle un balón con los pies a Anelka.
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