El tenista español David Ferrer, número siete del mundo, ha avanzado a octavos de final del Masters 1.000 de Miami (Estados Unidos), segundo de la temporada, tras ganar en su partido de tercera ronda al checo Lukas Rosol en dos sets (6-4, 7-5).
El alicantino, que en su estreno en el torneo estadounidense el pasado sábado había arrasado al argentino Federico Delbonis (6-1, 6-1), se encontró más oposición este lunes en Crandon Park ante un rival, favorito número 26, que fue capaz de responder a sus golpes durante los primeros compases del encuentro.
‘Ferru’ tuvo que aguardar hasta el sexto juego del primer set para firmar la primera rotura del encuentro, aunque el checo logró igualar la contienda con un quiebre en el noveno. Sin embargo, en el siguiente juego el español respondió con un ‘contrabreak’ que le sirvió para cerrar el parcial a su favor.
La segunda manga se caracterizó por la igualdad entre los contendientes, que no cedieron su saque en los once primeros juegos. De hecho, Ferrer, en el noveno juego, llegó a gozar de dos bolas de partido, pero el árbitro del encuentro decretó que en la jugada en la que el alicantino había salido victorioso la pelota se había marchado fuera; Rosol defendió su servicio.
La tensión fue la protagonista del duodécimo juego, donde Ferrer dispuso de hasta cinco bolas de partido. En la última de ellas y tras una hora y 32 minutos de partido, el español ganó el duelo y avanzó a octavos de final, ronda en la que el pasado curso cayó eliminado ante el japonés Kei Nishikori (7-6(7), 6-2, 7-6(9)).
De esta manera, el de Jávea se medirá en la siguiente ronda con el ganador del duelo entre el francés Gilles Simon, favorito número 12 del torneo, y el colombiano Alejandro Falla, procedente de la previa y que en segunda ronda derrotó al croata Ivo Karlovic.
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