El piloto alemán de Fórmula 1 Nico Rosberg (Mercedes) ha logrado este domingo la victoria en el Gran Premio de Austria por delante de su compañero de equipo, el británico Lewis Hamilton, y del finlandés Valtteri Bottas (Williams), en una carrera en la que el español Fernando Alonso (Ferrari) logró una meritoria quinta posición siendo el primer coche con motor no Mercedes en cruzar la línea de meta.
En ocho carreras, la marca alemana ha sumado siete victorias y seis dobletes, demostrando que esta temporada nadie se les acerca y parece, cuando aún no se ha llegado al ecuador del campeonato, que el título se lo van a disputar entre Rosberg y Hamilton.
Este domingo en el circuito de Red Bull Ring, ante la sorpresa generalizada, partía desde la ‘pole’ Felipe Massa (Williams). El brasileño salió bien y mantuvo la primera plaza, pero se fue desinflando y tan solo pudo acabar cuarto. Por delante de él entró su compañero Bottas que, tras una carrera magnífica, logró aguantar el ritmo de los Mercedes.
El finlandés solo sucumbió tras una gran estrategia de la marca alemana, que en la última entrada a boxes consiguió meter a sus pilotos antes de que a Williams le diese tiempo a reaccionar, entró más tarde y salió tras los coches más rápidos del campeonato, a pesar de lo cual tan solo llegó a ocho segundos. Primer podio para él y demostración de que los motores Mercedes funcionan muy bien.
En cuanto a los dominadores de la Fórmula 1, esta vez tuvieron carreras diferentes. Hamilton salió desde la quinta fila, a pesar de lo cual en la octava vuelta ya era cuarto, tras una brillante salida. A partir de ahí dedicó sus esfuerzos a superar a los Williams, algo que logró en boxes, y desde ese instante en las últimas veinte vueltas apretó a su compañero Rosberg, hasta llegar a menos de dos segundos de él.
El alemán volvió a mostrar una regularidad brillante. Partió tercero, se puso líder en las primeras quince vueltas y desde ese momento no se permitió ningún error, ni siquiera cuando su compañero más apretaba. Se trató de la tercera victoria en este Mundial para Rosberg, que en las ocho carreras disputadas nunca ha bajado del segundo puesto y que lidera el campeonato con 29 puntos de ventaja sobre su compañero.
ALONSO, EL MEJOR DE LOS ‘MORTALES’.
En cuanto al español Fernando Alonso, logró una gran quinta posición en una carrera en la que fue el primer coche con motor no Mercedes en ver la bandera a cuadros. El asturiano finalizó cinco puestos y casi treinta segundos por delante de su compañero Kimi Raikkonen.
Alonso llegó incluso a amenazar la cuarta posición de Massa en las últimas vueltas, pero finalmente la potencia de su coche no le dio para poder superar al Williams. Aún así, probablemente se trató de la mejor carrera del año para él.
Por otra parte, en el circuito de Red Bull, sus pilotos no pudieron tener un peor día. Daniel Ricciardo, que venía de ganar en Canadá, no pudo pasar de la novena posición, mientras que Sebastian Vettel tuvo problemas mecánicos desde la salida y acabó por abandonar en la vuelta 37. Annus horribilis para el tetracampeón del mundo, que a día de hoy es quinto del Mundial a 105 puntos del líder.
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