La pareja formada por Marcel Granollers y Marc López ha entrado a formar parte de la historia del tenis español al proclamarse este lunes campeona de la Copa Masters tras vencer, en un duelo de dobles disputado en el 02 de Londres, a los indios Mahesh Bhupathi y Rohan Bopanna (7-5, 3-6, 10-3).
Era la primera vez que alcanzaban la final del Torneo de Maestros. De hecho, ninguna pareja española vivió este último partido en Londres desde que Sergio Casal y Emilio Sánchez Vicario la alcanzaran en 1988 y 1990. En esta ocasión, los barceloneses han emulado a Juan Gisbert y Manuel Orantes y se han convertido en la segunda pareja española que levanta este trofeo.
López y Granollers, que suman su tercer título conjunto este año tras adjudicarse los torneos de Roma y Gstaad, saltaron a la pista londinense sin presión, desplegando su juego habitual y a sabiendas de que estaban a tan solo un partido de la gloria.
El duelo se les puso muy de cara a los españoles tras la disputa del tercer juego, cuando rompieron el servicio de los indios para tomar una mínima ventaja en un choque muy equilibrado. Sin embargo, Bhupathi y Bopanna sumaron su primer ‘break’ en el siguiente punto y consiguieron imponer la igualdad en el marcador hasta el final del primer set.
Con el cinco iguales, la pareja española sumó su segundo ‘break’ y volvió a tener la manga en su mano. En esta ocasión, Marcel y Marc no fallaron en su saque y, por medio de una gran volea de Granollers, pudieron cerrar el set a su favor.
En la segunda manga, los españoles no estuvieron muy acertados en el primer servicio y acabaron acusando algunos errores. Después de conservar ambas parejas su saque, los indios se apuntaron un nuevo ‘break’ cuando el resultado les era favorable. Con el 5-3, Bhupathi y Bopanna no erraron en su saque y, a pesar de la resistencia española, acabaron llevando el partido al ‘tie-break’ a través de un potente saque directo.
En la muerte súbita, los catalanes recuperaron la confianza y fueron infinitamente superiores a sus rivales. Con el 9-3 y seis bolas de partido a su favor, López y Granollers no fallaron en la primera y estallaron de júbilo al conocer que el título de Maestros era ya una realidad.
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