Los dos goles de Aritz Aduriz y el tanto de Fernando Llorente sólo un minuto después de saltar al campo han servido al Athletic Club para rescatar un punto ante el Espanyol (3-3) en la cuarta jornada de la Liga BBVA, en un encuentro en el que los de Pochettino lograron adelantarse en dos ocasiones, pero en el que al final sólo han podido sumar su primer punto de la temporada.
Con Llorente ya en el banquillo por primera vez en la temporada, Bielsa apostó por Aduriz en la sesión matutina de Cornellà-El Prat. El conjunto vasco sufrió casi desde el inicio la presión en la salida del balón y mostró sus dificultades a la hora de sacar la pelota jugada, con un Espanyol extremadamente cómodo.
No tardó en llegar el tanto para el conjunto catalán. En el minuto 19 y tras una gran jugada de equipo, Verdú observaba a Javi López desmarcado; el lateral sevillano, con un disparo cruzado raso, no tuvo problemas para superar a Iraizoz. La respuesta visitante vino en un saque de esquina desde la izquierda, en el que la indecisión del guardameta espanyolista hizo que Aduriz pudiese rematar solo de cabeza, aunque el balón se estrelló en el larguero.
Pero fue un espejismo. Las mejores ocasiones eran locales, en un equipo en el que todo el juego pasaba por las botas de Verdú. En una de ellas, en el 40, Longo lograba deshacerse de la marca de Iturraspe y driblaba a Iraizoz para quedarse sólo ante el arco; sin embargo, el regate se le fue largo y la pelota se marchaba pegada al palo sin que el italiano acertase a rematar.
No hubo tiempo para lamentos, ya que al filo del descanso Longo cogía el esférico en el interior del área y, tras el rechazo del portero visitante, Verdú sólo tenía que poner la bota para poner el balón dentro de la portería. Un premio para la apuesta del Espanyol en la primera mitad.
Bielsa no tardó en mover el banquillo para intentar poner remedio a la situación. En la reanudación, Ibai Gómez entró en sustitución de De Marcos, segundo después del cambio obligatorio anterior por la lesión de Íñigo Pérez. Fue precisamente el delantero bilbaíno el que en el minuto 55 botaba una falta lateral desde la derecha para que Aduriz, libre de marca, recortase distancias. Fue el comienzo de la reacción vasca, que sólo cinco minutos después tuvo el empate en una doble ocasión en la que un cabezazo de Aduriz obligó a Forlín a sacar el balón bajo palos.
Y llegó Llorente. En el minuto 69, el delantero, que no jugaba partido oficial con el Athletic desde la final de Copa ante el FC Barcelona, volvía a pisar el campo y un minuto después, en el primer balón que tocaba, hacía el empate tras un pase en profundidad de Muniain. En un disparo cruzado con la zurda, Llorente soltaba toda la rabia contenida en los últimos meses.
La entrada del riojano, que se mostró insaciable, cambió al conjunto de Bielsa, que se hizo con el mando del encuentro. Sin embargo, cuando mejor jugaba el Athletic, Wakaso ponía un gran pase al espacio a Longo para que éste definiese magistralmente ante la salida de Iraizoz. En esa misma jugada, el delantero transalpino se iba a la calle tras ver la segunda amarilla por celebrar el tanto con los aficionados.
Cuando el partido se encaminaba hacia la primera victoria ‘perica’ de la temporada, Aduriz se sacaba un golazo de la chistera tras lograr rematar de volea un centro al punto de penalti de Susaeta. De esta forma, el Athletic logra sumar por segunda semana consecutiva, mientras que el Espanyol mantiene sus urgencias con sólo un punto en su casillero.
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