El FC Barcelona Alusport ha revalido su corona y se ha vuelto a proclamar campeón de la División de Honor de la Liga Nacional de Fútbol Sala, tras superar a domicilio a ElPozo Murcia (3-6) en la prórroga del quinto y definitivo partido de la final.
El conjunto azulgrana mostró madera de campeón para llevarse la victoria en un partido que perdía a falta de cinco minutos. Dos goles de Sergio Lozano, uno para forzar la prórroga y otro para poner por delante a su equipo en el tiempo añadido, cimentaron la remontada del Barça, que completa una temporada de ensueño en la que también ha ganado Futsal Cup, Copa del Rey y Copa de España.
El campeón supo responder a cada golpe propinado por su rival, empezando por el penalti, cometido por Gabriel sobre Alex, que Sedano le paró a Esquerdinha al poco de empezar el partido. Sin embargo, la afición murciana no tuvo que esperar mucho para cantar el primer gol de su equipo, con una jugada ensayada en la que Kike se la dejó a De Bail, que fusiló a Cristian.
Acto seguido, el conjunto visitante reaccionó por medio de Javi Rodríguez, que se echó al equipo a la espalda en su último partido con la zamarra azulgrana. El capitán apareció por sorpresa para rematar a la red un pase de Saad y, justo antes del descanso, Sergio Lozano estuvo a punto de adelantar al Barça, pero falló el doble penalti.
EL ‘BÚFALO’ LOZANO APARECE PARA DECIDIR LA FINAL
Tras el paso por vestuarios, el partido se aceleró y llegaron tres goles en apenas un minuto que parecían dejar el título franco para los murcianos. Primero anotó Esquerdinha y en la siguiente jugada empató de nuevo Javí Rodríguez, con un tanto muy protestado por posible mano en el control.
Autor de dos tantos, el capitán azulgrana cometió un error acto seguido al perder un balón en su aire y derribar a Kike, que se la había robado. Esta vez Miguelín sí convirtió el penalti (3-2), acercando el título a Murcia a falta de trece minutos para el final. Un remate acrobático al palo de Torrás inició la última fase del choque, diez minutos en los que aún debía decidirse todo tras más de tres horas acumuladas de final.
Marc Carmona quemó las naves situando a Saad de portero-jugador y el Barça arrinconó a su adversario. El premio al atrevimiento llegó a falta de cuatro minutos, cuando Lozano mandó a la red un jugada ensayada cocinada con Torras, que a punto estuvo de marcar el tanto del triunfo en el último segundo.
El ‘Búfalo’ Lozano volvió a parecer nada más iniciarse la prórroga, cuando dispuso de su segundo doble penalti y lo mandó a la escuadra con un violento latigazo que Rafa ni vio pasar. Era la primera ventaja en el partido del equipo catalán, que no perdonó el primer contraataque cuando su rival ya jugaba con portero-jugador. Robó Lozano y le cedió el tanto a Wilde, que después cerró la cuenta con el sexto de la noche y una impetuosa celebración que generó indignación en su antigua afición.
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