El FC Barcelona ha goleado este martes (5-3), con más sufrimiento de lo que refleja el marcador, a un Granada que llegó incluso a empatar el partido en la segunda parte, aunque finalmente los de Pep Guardiola se hicieron con la victoria, comandados por un nuevamente excelso Lionel Messi, que firmó un ‘hat-trick’ para firmar con letras de oro en el libro de la historia ‘culé’.
Una vez más, ‘la Pulga’ derribó fronteras. Muchas son las voces que señalan que en el futuro será considerado ‘el quinto grande’ al mismo nivel que Di Stéfano, Pelé, Cruyff y Maradona. En el presente, Messi dio caza y adelantó provisionalmente a Cristiano, llegando a la friolera de 34 goles en Liga, para situarse en cabeza del Trofeo Pichichi. La batalla del pasado la ganó este martes, puesto que tras los dos goles anotados, superó los 232 tantos de Cesar, hasta entonces máximo goleador de la historia del Barça, para situarse con 234.
Antes de que los aficionados que poblaron el Camp Nou hubieran podido acomodarse en sus butacas, el FC Barcelona ya había abierto el partido. Una de las novedades en el once de Pep Guardiola, el joven Isaac Cuenca, se fue de su par y colgó un balón hacia el segundo palo, donde apareció Messi, que de cabeza cedió atrás para que Xavi de volea inaugurase el marcador.
Apenas diez minutos después del primer tanto local, Cuenca calcó el desborde y el centro a la otra orilla del área defendida por Julio Cesar. El que no repetiría su participación sería Leo Messi, que con un toque de primeras, sutil a la par que sencillo, con el interior de su pierna izquierda estrelló el esférico en un poste y éste se introdujo en las mallas granadinas.
Los de Pep Guardiola se marcharon al vestuario sin acrecentar su cuenta anotadora, pero sin desguarnecer la retaguardia. En el otro lado del campo, el Granada apenas se asomó al área defendida por Víctor Valdés, que pasó inadvertido la primera parte.
DE NOCHE DE PESADILLA A DESENLACE TRIUNFAL
La calma que sobrevoló el césped del coliseo ‘culé’ se tornó en tormenta a la vuelta de vestuarios, puesto que en un cuarto de hora, el Granada puso las tablas en el marcador, y no contento con ello, los de Abel Resino creyeron en sus posibilidades, inquietaron la meta de Valdés e incluso por momento hicieron peligrar el empate.
Primero fue el central Mainz con la testa el que se preocupase de hacer cambiar el guión del partido, tras mandar a la red una falta lateral. Instantes después, Siqueira transformó una pena máxima que Dani Alves cometió sobre Dani Benítez, cuando éste se internaba en el área de Valdés.
Pero cuando peor estaba el panorama para los de Pep Guardiola, siempre emerge la figura de Messi. En esta ocasión fue un esférico aéreo de Dani Alves que superó la línea de los cuatro zagueros granadinos el que controló el argentino para volver a firmar una nueva vaselina, suerte en la que parece haberse especializado en los últimos tiempos.
Una vez que se sacudieron los nervios de encima, los blaugranas se desquitaron y volvieron a dominar al Granada. De hecho, en un corto intervalo de tiempo, el Barcelona logró dos goles más. Primero Tello, tras un rechace de Julio Cesar, y después Messi, que redondeó su ‘hat-trick’ tras driblar al guardameta y anotar a placer.
Finalmente, la victoria (5-3) fue para los ‘culés’, más allá de que en los últimos instantes del partido, los de Abel Resino acortasen distancias desde los 11 metros por un nuevo penalti cometido por Dani Alves, expulsado, y materializado nuevamente por Siqueira. Con estos tres puntos, ya son sólo cinco los que separan al FC Barcelona del Real Madrid, por lo que la lucha por la Liga, al igual que pasó con el partido, aún tendrá que dar muchas vueltas.
Sorry, the comment form is closed at this time.