El Sevilla logró un empate en el último suspiro (2-2) en casa ante el Racing de Santander, en un equilibrado y sorprendente partido correspondiente a la décima jornada de la Liga BBVA, que se disputaba en el Sánchez Pizjuán.
El choque suponía una prueba de fuego para el conjunto racinguista, que se encontraba último en la clasificación de la Liga española, tras no ganar ninguno de los encuentros disputados. Por su parte el Sevilla, continúa sintiéndose líder espiritual de la ‘otra Liga’ tras seguir invicto, y tras su glorioso paso por el Camp Nou.
En los primeros minutos del partido, los de Cúper se mostraban fuertes, creando varias situaciones de peligro contra el club andaluz, que supo coger un frenético ritmo mediada la primera mitad, llegando a compensar el ataque de los montañeses con un primer tanto gracias al cabezazo de Manu del Moral.
El cuadro de Marcelino García Toral trataba de imponerse con ímpetu, pero se enfrentaba a la presencia del arquero verdiblanco Toño, quien supo frenar las expectativas sevillistas, y consiguió que su equipo llegara al descanso perdiendo por la mínima.
En la reanudación, el Racing regresaba, por lo menos, con ganas de igualar el electrónico, y lo consiguió tras el potente remate de cabeza de Ariel, lo que supuso un halo de esperanza para los cántabros. No quedó ahí el contraataque del club montañés, que consiguió un 1-2 a su favor cuando Jairo recibió un gran pase de Diop y disparó un acierto a portería.
A pocos minutos del final del partido, Manu del Moral completaba su doblete de cabeza salvando así a la plantilla del Sevilla de perder su primer partido en casa y manteniendo a flote la moral de la plantilla tras su excelente empate ante el FC Barcelona.
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