La selección española de fútbol ha sellado su clasificación matemática para la próxima Eurocopa de Polonia y Ucrania tras cumplir el guión previsto y despedazar sin miramientos a la débil selección de Liechtenstein (6-0) en el partido celebrado este martes en el estadio logroñés de Las Gaunas.
La siesta del coloso duró la media hora que las once hormigas obreras de Liechtenstein arrimaron el hombro a la par, hasta que un mandoble de Negredo descerrajó la portería de Jehle. Abierto el cofre, los jugadores españoles no se privaron del saqueo y regalaron otros cinco tantos a la entregada afición riojana, que reservó su mayor ovación para el hijo pródigo Fernando Llorente.
La proverbial calma de Vicente del Bosque esconde una inquebrantable contundencia a la hora de tomar decisiones. En la víspera se debatía quién acompañaría a Villa en el ataque y no fueron ni el local Llorente ni el prestigioso Torres. Una vez más jugó el que estaba más en forma, como rige la lógica que tantas veces añora el fútbol, y Negredo respondió haciendo lo que sabe.
Media docena de ocasiones acumuló la selección española mientras se desperezaba. Antes de que el agua hirviera de verdad, los jugadores de Liechtentein, un país con la cuarta parte de habitantes que tiene Logroño, se atrevieron a meter los pies en la piscina. Riztberger coqueteó con el gol en un tiro lejano y Hasler se marcó una ruleta que provocó el aplauso del respetable.
Pero Xavi se cansó. El cerebro, que incluso había fallado dos pases fáciles en los primeros minutos, le metió una pase interior inmaculado a Negredo, para que perforara con uno de sus habituales zarpazos. Los hermanos Stocklasa, jefes de la zaga visitante, no afinaron bien el fuera de juego y el madrileño convirtió el fallo. Gol en Las Gaunas.
UNA HORA PARA LOS PEQUEÑOS DETALLES
El primer tanto liberó a los campeones del mundo, que empezaron a mezclar con clarividencia y cuatro minutos después pulieron una joya, quizá de bisutería porque nació de un fuera de juego de Villa. Iniesta acarició el balón al hueco, el asturiano la puso de tacón a Negredo y el punta del Sevilla apuró la bola al palo derecho para anotar su segundo. Justo antes del descanso, Xavi mutó en Medusa y revistió de piedra a Jehle con un maravilloso tanto de falta.
Con el trabajo cumplido al descanso, la segunda parte sirvió para resolver pequeños asuntos pendientes. Fábregas ensayó como el futuro relevo de Xavi, Thiago Alcántara confirmó que jamás vestirá la camiseta de la selección brasileña, Del Bosque curioseó con la probeta táctica y la afición riojana pudo saborear durante media de hora el empeño de Llorente.
Antes, Ramos remató a la red un centro peinado por Negredo y Villa resolvió con espeluznante sangre fría un pase al corazón del área pergeñado por Mata desde la banda. El asturiano rozó el sexto con la jugada individual más vistosa de la noche, pero salió un poco trastabillo de la ‘croqueta’ que cocinó entre dos defensas y Jehle pudo salvar este tanto, pero no el siguiente mordisco del ‘Guaje’, que embocó a placer un centro de Xabi Alonso.
España perdonó más goles y el partido murió plácidamente, una vez confirmada la clasificación para la próxima Eurocopa, a falta de los encuentros intrascedentes ante República Checa y Escocia. La campeona europea y mundial ya tiene la escopeta cargada de nuevo. A partir del 8 de junio volverá a apuntar a la diana de un título.
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