Ayer conocí a Aida, una señora de 80 años que desprendía vida además del humo de un cigarrillo de liar. Quedé con ella para que me enseñara un piso en alquiler y al final fue lo de menos. Hablamos durante al menos una hora de la vida, de su experiencia profesional como periodista desde tiempos del Movimiento, de sus afanes y de su marido, fallecido hacía dos años. Sin perder la sonrisa, sus ojos se humedecieron al contármelo.
Cuando me fui, quedamos en ponernos en contacto y me dio la dirección de su correo electrónico, formada por su nombre y el de su marido.
Esta mañana escuchando «Hoy empieza todo» he conocido a Anni B Sweet y me ha parecido que, a pesar de la diferencia de edad, esta canción le gustaría a Aida.
Si en una hora viste todo eso, imagínate como es…
Muy de vez en cuando nace una gran mujer como ella.
Me lo puedo imaginar, Ana. No sé qué relación te une con Aida pero cuídala mucho, se lo merece.