¿Puede ser que los niños maduren antes en las grandes ciudades? ¿Que pierdan al menos su ingenua visión de las cosas con mayor facilidad? Hace unos días interrumpí el juego de un niño que se entretenía haciendo una fila interminable de coches:
-Hombre, Juanito, qué fila de coches más chula.
Respuesta de Juanito:
– No es una fila. Es un atasco.
Lo peor de todo es que me lo decía con cierto aire de desprecio. Como si me reprochara no haber sido capaz de adivinarlo a la primera.
La nueva reflexión de Álvaro Lucas http://fb.me/Rian7aPx