Contra una reforma laboral "perversa" y bajo el lema "quieren acabar con todo", hoy, 29 de marzo, fue jornada de huelga general. El seguimiento de los paros en el Corredor del Henares, alcanzó, según los sindicatos, un seguimiento del 90 por ciento en algunos sectores. Destacaron, sobre todo, la normalidad con la que transcurrió la convocatoria, sin altercados y basada en el diálogo.
gentedigital / Patricia M. Molinero
29/3/2012 - 21:38
"Es una huelga tranquila y no hubo que hacer muchas cosas para que la gente se sumara, aunque el centro de las ciudades de otro aspecto, en la construcción y en los transportes, se están dando los servicios mínimos". aseguró Juan Carlos Rejano, responsable de CC.OO en el Corredor del Henares.
Necesaria y más que justificada. Ir a la huelga es salvaguardar el futuro y volver a demostrar un "no" rotundo a la medida que puso en marcha, el pasado 11 de febrero, el Gobierno de Mariano Rajoy y que ya se está aplicando en muchas empresas del Este de la Comunidad de Madrid. "Tenemos el caso de una mujer que estuvo nueve días de baja y, finalmente, fue despedida acogiéndose a la reforma", confirmó Santiago Clemente, Secretario General de CC.OO en la Comarca del Este.
Comparten argumentos desde UGT. "Han hecho normativa muy agresiva, que acaba con todos los derechos de los trabajadores", indica José Delgado, miembro de este sindicato. Y van a más. "No hacer la huelga hoy, garantiza que el despido de mañana sea mucho más fácil", añadió Rejano.
Dicen que el diálogo ha protagonizado la mañana. En Torrejón de Ardoz hubo concentración a las puertas del Ayuntamiento. Como incidentes a destacar, la detención de una trabajadora en la empresa INDRA o la negativa de Envialía, en Las Monjas, a que un piquete informativo accediera a las instalaciones. También hubo algún incidente en el CTC de Coslada. La presencia policial en las calles ha sido una constante y algunos supermercados abrieron más tarde, aunque en los polígonos industriales reinaba la tranquilidad. "No hemos tenido actividad de piquetes, no hemos visto nada. Está todo muy tranquilo", destacaba un trabajador de Ochoa. "Nosotros somos 15 y hemos venido todo, aunque algunos compañeros han llegado tarde", añadió.
Los transportes públicos cumplieron servicios mínimos. "He tardado dos horas y media en llegar a Torrejón, cuando, normalmente, este recorrido lo hago en hora y cuarto", destacaba uno de los ususarios de RENFE a las puertas de la estación. En los autobuses más de lo mismo. "He tenido que venir a Torrejón para llegar a mi puesto de trabajo porque, desde donde yo vivo, no hay medio de transporte", contó una de las viajeras.
CC.OO y UGT insisten. Es momento de reivindicar, en la calle y a ritmo de presión, el rechazo a una reforma que, según alegan, destruirá empleo y ataca, directamente, al trabajador.
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