Una gran sardinada que tuvo lugar en el Recinto Ferial de San Fernando de Henares puso fin a las jornadas de Carnaval. La gastronomía pone el broche final al festejo que arrancó en el Teatro Municipal Federico García Lorca con el ya tradicional velatorio.
Patricia M. Molinero / gentedigital
14/2/2013 - 17:45
Las plañideras volvieron a hacer de las suyas. Vestidas de negro y con pañuelo en mano lloraron a la pobre sardina. Fueron las grandes protagonistas de una jornada lúdica con la que San Fernando puso fin a los carnavales. Primero tuvo lugar el y tradicional velatorio, con punto de encuentro en el Teatro Municipal Federico García Lorca. Al ritmo de la música, los presentes bailaron y sacaron más de una lágrima. Despúes, el cortejo fúnebre, encabezado por una calesa de caballos negros, llegó hasta el Recinto Ferial, donde se procedió a la quema de la sardina para dar paso al reparto de 450 kilos de este manjar culinario. También se sirvieron refrescos y vino, todo a cargo de las peñas del municipio. "Hemos empezado a preparar la parrilla alrededor de las cinco de la tarde", contaba María, de la peña Puff.
La música continuó hasta pasadas las 22:00 horas. "El año pasado no se hizo y hemos podido recuperar esta costumbre que es lo que más gusta del entierro de la sardina", añadía la peñista. Recordar que, según concrentó el concejal de Festejos, la sardinada supone una inversión cercana a los 2.000 euros.
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