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Un nuevo terremoto de 6.1 grados sacude a Haití ocho días después

Se produjo a las 12:03 de ayer miércoles, hora española, a 42 km. de Jacmel. Esta mala noticia nos llegaba mientras, una semana después del primer seísmo, todavía se rescatan supervivientes bajo los escombros. Moisés y Sabrina, dos niños de 10 y 7 años, son dos de ellos.

Archivado en: haiti, terremoto, seismo, ayuda humanitaria

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gentedigital.es/P. Costa/E.P.
20/1/2010 - 08:08

El nuevo terremoto de 6,1 grados en la escala de Richter registrado en Haití ha causado escenas de pánico en la capital, Puerto Príncipe, donde la gente que dormía en campamentos ha salido a las calles y ha intentado alejarse de los edificios dañados por el seísmo de hace ocho días.

De momento no se ha informado sobre daños o víctimas. Según el Instituto Geológico de Estados Unidos (USGS), la réplica se produjo a las 6:03, hora local (12:03, hora española), y su epicentro se ha localizado a 9,9 kilómetros de profundidad y a 42 kilómetros al oeste-noroeste de Jacmel -una de las localidades más afectadas por el terremoto de 7,3 grados de hace ocho días- y a 60 kilómetros al oeste-noroeste de la capital, Puerto Príncipe.

El terremoto del pasado 12 de enero -cuyo epicentro se registró a 10 kilómetros de profundidad y a 15 kilómetros de la capital- causó al menos 75.000 muertos, 250.000 heridos y más de un millón de personas sin hogar, según los últimos dados de la Dirección de la Protección Civil (DCP, organismo dependiente del Ministerio del Interior.

Desde entonces, miles de personas prefieren dormir al raso en las calles de la capital por temor a las réplicas. El seísmo afectó a los veinte municipios del departamento de Oeste (en especial, Carrefour, Grand-Goave, Gressier, Léogane, Petit-Goave y Puerto Príncipe) y a los diez del departamento de Sureste (sobre todo su capital, Jacmel).

GANAS DE VIVIR

Sabrina y Moisés llevaban siete días sepultados entre los escombros de un edificio de dos plantas que se vino abajo en Puerto Príncipe, pero, por suerte, pudieron ser rescatados a tiempo y trasladados a un hospital de campaña israelí cercano, según informó la CNN. En el rescate participaron agentes de los servicios de Policía y Bomberos de Nueva York.

Aunque más que con la CNN, me quedo con la retransmisión que esta noche han hecho Nicolás Castellano y Paco Quiroga, corresponsales de la cadena SER en Haití, que nos relataron el rescate de los pequeños como pocos periodistas podrían haberlo hecho.

Nos contaron paso a paso la "resurrección" de estos dos niños, que volvieron a la vida "sin ni una sola herida", cuenta Castellano. Tan sólo estaban deshidratados y con muchas ganas de enlazar sus manos, algo que pudieron hacer una vez en la ambulancia, donde también viajaron los compañeros de la SER.

Los padres de los niños, que han perdido a otros tres hijos en la tragedia, no se lo podían creer y, ya en el hospital, se arrodillaban ante los bomberos dándoles las gracias.

"Mantener la vida no tiene nombre", explicó esta mañana Noe Zuñiga en 'Hoy por hoy'. Noe es un policía mexicano que desde pequeño colabora con Cruz Roja, y que condujo la ambulancia con los dos niños a bordo. También explicó la imagen dantesca que capturó al ver a Moisés. El pequeño llevaba guardado en su mano derecha "un dedo putrefacto de un familiar. Una escena muy dura", concluyó.

Escucha aquí la retransmisión de Castellano y Quiroga:

El enviado especial de la SER nos cuenta el rescate de dos niños en los escombros

Horas antes, una mujer fue extraída con vida de unos restos cercanos a la catedral. Su hijo, Maxime Janvier, relato a la CNN que nunca había perdido la esperanza de encontrar viva a su madre, por la que reconoció haber rezado mucho.

También esta cadena estodunidense nos muestra cómo un fotógrafo salva un niño en plena calle, en medio de la violencia y los pillajes que terminan por romper en pedazos un país del que poco queda: