Cuando la aceptación de las formas condiciona el contenido
El filme impactó en San Sebastián por el 'supuesto' tratamiento de la problemática terrorista en el País Vasco. Pero no tiene nada que ver con eso. Reflexiona sobre la naturaleza del ser humano, aunque utiliza un lenguaje audiovisual demasiado inusual.
Archivado en: cine, Tiro en la cabeza, Jaime Rosales
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gentedigital.es/Marcos Blanco
09/10/2008 - 08:49
Aunque el público de San Sebastián tendrá sus razones, no acierto a comprender porqué la nueva película de Rosales ha suscitado tanta polémica durante la última edición del festival. El planteamiento resulta interesante, dejando entrever cómo un hombre aparentemente normal, con unos hábitos tan cotidianos como los tuyos o los míos, puede convertirse en asesino al sentirse amenazado, utilizando una violencia extrema e incomprensible basada en su ideología política.
Existe durante el metraje la intención filosófica de mostrar tal transformación, de darle vueltas a
la naturaleza humana, repleta de interrogantes. Todo ello, partiendo de un hecho brutal: el asesinato terrorista que acabó, aquel 1 de diciembre, con la vida de dos guardias civiles en Capbreton. El trasfondo de ‘Tiro en la cabeza' nos podría situar en cualquier otro país, dentro de cualquier otra tendencia radical, cuyas ideas se imponen a base de balazos sanguinarios.
No obstante, el lenguaje audiovisual utilizado por Rosales es diferente al que estamos acostumbrados y provoca cierta pesadumbre, una sensación momentánea de pesadez. Rosales ha decidido anular los diálogos, sopesando que si los hubiese serían demasiado vanales. De este modo, la comunicación no verbal y la gestualidad conducen el desarrollo de la obra cinemato-gráfica, recordando a esos documentales de animales que más de uno agradece durante la siesta.
SIN DIÁLOGOS
Podríamos estar hablando de cine mudo, aunque la falta de intensidad escénica, con sólo un
punto álgido desde el punto de vista dramático, se distancia del ‘modus operandi' habitual.
En otro sentido, la lograda cercanía que siente el espectador cuando ‘persigue' a Ion se debe a esas lentes con una larga distancia focal, propiciando una imagen casi plana. Pero, por encima de todo, la clave primordial para conquistar al público estriba en cómo acepte cada espectador un estilo, que al menos, es inusual en el ámbito comercial.
Tiro en la cabeza
Director: Jaime Rosales. Intérpretes: Ion Arretxe, Sephanie Pecastaing, Diego Gutiérrez, Iván
Moreno, Nerea Cobrero. Género: Drama. Nacionalidad: España. Duración: 85 minutos.
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