Los vecinos habían alertado de la actividad ilegal en el 31 de la calle Celindas.
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gentedigital.es/Marcos Blanco Hermida
08/4/2011 - 14:54
Un obrero de 40 años de procedencia rumana falleció este lunes en el chalé de la calle Celindas número 31 (Chamartín) durante la realización de unas obras en un inmueble que, según los vecinos, carecía de autorización y las investigaciones sobre el suceso, en las que participa Salud Laboral de UGT-Madrid, también dejan entrever que el fallecido no poseía el correspondiente contrato laboral.
GENTE se desplazó hasta el domicilio y pudo comprobar cómo dos obreros realizaban trabajos, por orden del juez, para darle estabilidad a la estructura arquitectónica. En el exterior, se podía leer lo siguiente en un cartel: 'Precintado por la autoridad judicial. No levantar el precinto sin la autorización de la autoridad competente'.
Tras las constantes quejas vecinales durante la pasada semana sobre la supuesta ilegidad de las reformas en el número 31 de la calle Celindas, un técnico de la Junta Municipal acudió a este sitio para comprobar esta denuncia sin que le permitiesen la entrada. Por lo tanto, el Consistio abrió un expediente y preparaba para el día del fatídico suceso un requerimiento que permitiese paralizar las obras. El accidente tuvo lugar durante la mencionada jornada, en torno a las 14:15 horas, como apuntaron desde Emergencias Comunidad de Madrid 112. A uno de los dos obreros presentes se le vino encima el muro en la planta baja de la vivienda, que posee tres alturas. Tres dotaciones de bomberos acudieron al chalé, apuntalaron el muro y fijaron el forjado del techo para evitar desprendimientos. Después, llegaron los sanitarios del Summa 112, que no pudieron hacer nada por la vida del trabajador. A éste se le vino encima el muro, que le partió el cuello. Esta circunstancia pudo haber provocado su muerte en el acto.
SOLICITUD NO CONCEDIDA
Poco después, se ha comprobado que había una solicitud de obra, con fecha 9 de marzo de 2001, pero ésta no estaba concedida. Esta circunstancia, junto a las sospechas sobre la inadecuada situación laboral del fallecido, colocan una enorme interrogante sobre el suceso de la calle Celindas número 31.
UGT CALIFICA EL SUCESO COMO "INACEPTABLE"
Rosa Robledano, secretaria de Salud Laboral de UGT-Madrid, manifestaba su indignación por el suceso. "Al no haber medidas de seguridad en esta vivienda particular, se tocó la base que no corresponde", apunta. "Siguen produciéndose víctimas mortales en la construcción, pese a la actividad en el sector está bajando, y es inaceptable", recuerda. Más de 20 personas han fallecido por accidentes laborales dentro de la región durante el presente 2011.
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