Los comerciantes del Rastro, uno de los espacios de venta ambulante con mayor popularidad en la ciudad, solicitan al Ayuntamiento una mayor claridad sobre la situación de sus autorizaciones y no comprenden los motivos de las últimas intervenciones policiales en las jornadas dominicales.
Archivado en: Madrid, Rastro, Marcos Blanco
gentedigital.es/Marcos Blanco
08/2/2011 - 10:55
Los comerciantes del Rastro han reiterado su malestar en las últimas fechas por dos motivos fundamentales: el supuesto "acoso policial" al que afirman estar sometidos y la confusión generada por el estado de las autorizaciones y sus condiciones de renovación. Le han enviado una carta al alcalde Alberto Ruiz-Gallardón para constatar por escrito sus preocupaciones y recientemente han mantenido una reunión con Enrique Núñez, concejal presidente de Centro, sobre este tema.
La carta, firmada por 350 titulares de los puestos, solicita a Gallardón que les explique la situación administrativa de los negocios. Además, aborda el asunto policial e indica que "los agentes municipales han impedido en varias ocasiones trabajar en su puesto a los vendedores autorizados si a las 9 horas no tenían totalmente montado el puesto": Como no tienen conocimiento por escrito de este criterio de funcionamiento, lo consideran una imposición, que "choca frontalmente con la práctica habitual".
El alcalde no profundizó sobre este aspecto en la rueda de prensa posterior a la última Junta de Gobierno. "Nosotros aplicamos medidas para racionalizar ese espacio público, siempre público, no tenga duda, y lo hacemos totalmente en beneficio de los ciudadanos", aseguró el edil en relación al Rastro.
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