La medida también afecta a los establecimientos de hostelería, que podrán abrir hasta esa hora. El Gobierno regional lo justifica por el descenso en los contagios, a pesar de que Madrid tiene una de las incidencias más altas.
Archivado en: salud, sanidad, coronavirus, hostelería, economía
Jaime Domínguez
19/2/2021 - 00:09
El inicio del toque de queda en la Comunidad de Madrid, que se estableció a las 22 horas a comienzos de año por el aumento de los contagios, se ha retrasado hasta las 23 horas. La medida, que el Gobierno regional adelantó el pasado viernes 12 y que entró en vigor este jueves 18 de febrero, también afecta a la hostelería, que podrá cerrar a esa misma hora, y no a las 21 horas. El Ejecutivo lo justifica por el descenso de los casos de Covid-19 que ha experimentado la región en las últimas semanas. En concreto, ha pasado de casi mil casos por cada 100.000 habitantes de finales de enero a los 489 que se registraban este miércoles 17. A pesar de esta bajada, Madrid es la comunidad con una incidencia más alta de toda la península, solo superada por Melilla en el conjunto del país.
La medida no ha sido bien recibida por el Ministerio de Sanidad. Su titular, Carolina Darias, animó a las autonomías a "mantener las restricciones" hasta que la incidencia baje de 25 casos.
CONFIANZA DE ESCUDERO
El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, señaló que tienen "muy bien controlado" dónde se producen los contagios de Covid-19 en la región y que no se prevé que se "vaya a producir un aumento" a raíz del retraso del toque de queda.
Escudero insistió en que más del 80% de los nuevos positivos derivan de entornos sociales y familiares. "Es ahí donde las medidas se mantienen", apuntó, al tiempo que priorizó hacer más test diagnósticos.
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También para cines, teatros o auditorios: La posibilidad de abrir hasta las 23 horas no es exclusiva de la hostelería, si no que también afectará a otros locales de ocio como los cines, los teatros, los auditorios, los circos de carpa o las salas multiusos polivalentes. En el caso de los bares y los restaurantes, no podrán dejar entrar a nuevos clientes una vez que pasen las 22 horas, mientras que el servicio de recogida en el local se extenderá hasta la 23 horas y la apertura para servicio a domicilio hasta la medianoche. Lo que sí se mantiene es el límite de cuatro comensales por mesa en los interiores y de seis en las terrazas exteriores. |
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