domingo, 4 de agosto de 2024 20:21 www.gentedigital.es facebook twitter

Gente en León

Logotipo diario gente
Kiosko. Portadas de periódicos
Un amigo de León

No hay triunfo sin virtud

El más mínimo ritual obsesivo llega de la mano de múltiples incertidumbres que generamos.Nos proporciona algún tipo de ansiedad que termina por atormentarnos, haciéndonos caer en una extrema y larga condena. Nuestra vida, y en el día a día, se encuentra llena de acontecimientos positivos y otros tantos negativos; quizá algunos podemos controlar, aun así muchos no dependen de nosotros, se esfuman escapando a nuestro control.

Archivado en: Manu Salamanca, No hay tirunfo sin virtud

aumentar texto reducir texto imprimir enviar noticia comentar

Manu Salamanca
07/10/2022 - 01:10

Nuestra ansiedad está presente permanentemente. Nos levantamos pendientes de todo aquello que tenemos que hacer durante el día. Por ello nos vemos obligados a tomar ciertas decisiones como solución a todas aquellas cuestiones u objetivos autoimpuestos de manera inmediata. La lista pudiera ser más bien larga.
Debido a este ritmo de vida en el que nos vemos sumergidos, y tantas otras veces ahogados, no nos percatamos de que siempre atendemos a todo aquello que nos preocupa, a lo que tememos que suceda, y, que en principio, no cabe en nuestro tiempo, como sería el disfrutar de la parte agradable de nuestro mejor instante, pero con inmejorable cobertura.
Tenemos dificultades en vivir el presente y en frenar nuestra vorágine, como en ese tipo de desorganización o del mismo caos que pudiera darse en los sentimientos, y en la forma de vida que se adopte, nos impide sentir ese buen instante, disfrutando del placer momentáneo que atienda sólo a lo positivo.
Respecto a esto último que me acabo de referir, prescribirse un espacio de tiempo cada día, intentando ser parte de alguien, encabezaría un perfecto complot emocional, quizá con ese grupo de personas, por lo que nuestros pensamientos seguirían fluyendo sin obligarnos a responder. Nos defenderíamos mucho mejor de las ataduras; aun así, utilizaríamos su mecanismo de defensa para sobre todo ponernos en alerta y, ante esa preocupación extrema que manifestamos físicamente y acerca de un hecho que no sabemos si ocurrirá en un futuro próximo, esa misma sensación nos incomoda, nos sobrecoge como una relación normal al estrés.
Tener el control de todo siempre que podamos, nos predispone. "No hay triunfo sin virtud" . Reemplazaríamos nuestros pensamientos negativos construyendo una red de apoyo con nuestros amigos afines a nuestros deseos y logros. Es bueno distraerse con sensaciones benefactoras, que incluyan buena compañía siempre, si sube nuestra ansiedad, aumentará por tanto la necesidad de controlarnos de todo aquello que nos irrumpe y perjudica claramente. Ser felices.

añadir a meneame  añadir a freski  añadir a delicious  añadir a digg  añadir a technorati  añadir a yahoo  compartir en facebook  twittear 
Gente Digital en Facebook

Grupo de información GENTE · el líder nacional en prensa semanal gratuita según PGD-OJD
Desarrollado por Tres Tristes Tigres