Son ‘los chinos' un juego de azar muy poco oriental, casi es más orientativo que otra cosa. Ese tipo de entretenimiento ya no se encuentra tan de moda. La mayoría de nosotros sabemos que sirve para pasar un rato agradable con nuestros amigos en la esquina de cualquier taberna o bar y pone de manifiesto la habilidad que acompaña a su dedicación, haciendo crecer por momentos la euforia desatada que la misma suerte escondida en un puño cerrado, participa con gran esmero y tres monedas, quizá los mismos palillos, incluso unos dados que consecuentemente se atribuyen como pieza imprescindible pero, siempre como parte inexcusable del juego.
Archivado en: Manu Salamanca, el juego de 'los chinos', tres con las que saques
Manu Salamanca
22/4/2022 - 01:10
Dentro de su particular grandilocuente diversión el número que se canta, no puede ser nunca repetido, por lo que a priori el primero en cantar su probable salida, tiene clara ventaja.
En ningún caso, su número será inferior a las monedas que se tengan en ese momento en la mano, ya que tal acción se consideraría trampa. Ahora bien, dejar caer uno o varios ‘chinitos' en el suelo, como dejarlos igualmente en el bolsillo del pantalón, (así como el no quiere la cosa) tiene un nombre muy apropiado y característico, denominado ‘blancas' pero como una sorpresiva idea un tanto desconcertante que el intrépido jugador señala en cuestión.
Es rotatorio y el que acierta el número exacto se retira del juego y respira, ya puede beber su vinito o su cerveza tranquilo porque no paga la ronda y, junto con una sonrisa de oreja a oreja, saldrá claro ganador de la contienda. Ahora bien, su versión más conocida y encandilada exige llevar un marcador a tres veces continuadas, ganando aquel que primero llega, pero cuando sólo son dos los esforzados jugadores. Es un tradicional pasatiempo de grupo que gusta a un número determinado de personas que envalentonados por su dicharachera acción y del todo distendida, conjuran el azar que se compromete con el juego, es pura estrategia con cierta psicología, más bien. Tuvo su particular auge en fechas relativamente recientes, y entre la década de los 80 al 90, del siglo pasado. Su nombre tiene que ver con los pequeños objetos de formas redondeadas, que pueden encontrarse por cualquier parte y que sirven de ese modo tan natural en tan desenfadada distracción.
Es todo un reto por la manera alegre y oportunista que su vitoreada frase "TRES, con las que saques" sigue siendo protagonista de una velada que amigablemente sigue sujeta a una buena relación, a un buen comportamiento sociológico, y que hoy recuerdo con mucho cariño.
A Coruña | Albacete | Algeciras | Alicante | Almería | Ávila | Avilés | Badajoz | Barcelona | Bilbao | Burgos | Cáceres | Cádiz | Cartagena | Castellón | Ceuta | Ciudad Real | Córdoba | Cuenca | Gijón | Girona | Granada | Guadalajara | Huelva | Huesca | Ibiza | Jaén | Las Palmas de Gran Canaria | León | Lleida | Logroño | Lugo | Madrid | Málaga | Melilla | Mérida | Murcia | Ourense | Oviedo | Palencia | Palma de Mallorca | Pamplona | Pontevedra | Salamanca | San Sebastián | Santander | Santiago de Compostela | Segovia | Sevilla | Soria | Tarragona | Tenerife | Teruel | Toledo | Valencia | Valladolid | Vigo | Vitoria | Zamora | Zaragoza |
Grupo de información GENTE · el líder nacional en prensa semanal gratuita según PGD-OJD