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Gente en León

Un amigo de León

A pesar de lo que hay, aquí estamos

QUISIERA comenzar esta columna con un estado de ánimo mejor, pero las circunstancias son las que son. Por si fuera poco los dos malditos años de pandemia, contra la que venimos luchando y que tantas vidas se ha llevado y que, aunque con menores consecuencias ahí sigue acechando y con otras ramificaciones como si no tuviéramos suficiente con el COVID, llega la invasión de Ucrania.

Archivado en: Maximino Cañón, Putin, Ucrania, invasión de Ucrania, Partido Popular, Ayuso, Palblo Casado, COVID, Rusia

Maximino Cañón
04/3/2022 - 01:10

Siguiendo con los males en este año aparece un personaje importante, para lo malo, empeñado en hacer la guerra como si de un juego de niños se tratara, si no fuera porque los juguetes con los que juegan pueden hacernos saltar por los aires. Hasta el nombre le delata de lo que puede ser: PUTIN, que no es lo mismo que "putín", ya que una cosa es hacer putaditas y otra hacer las puñeta metiendo el miedo en el cuerpo a la humanidad con esas malditas armas nucleares que tiene mientras el pueblo malvive.
En estos días anda rebotando un whatsapp de teléfono en teléfono atribuida a un fotógrafo estadounidense (aunque nacido en Alemania) llamado Erich Hartman durante la Segunda Guerra Mundial, tiene una claridad en la definición dejando lo que representa en una reflexión, más que por desgracia, acertada que dice así: "La guerra es un lugar donde jóvenes que no se conocen y no se odian se matan entre sí, por la decisión de viejos que se odian pero no se matan". Más claro, el agua limpia.
Mientras esto acapara toda nuestra atención, no deja de tener vigencia otra ‘guerra', de mucho menor impacto, gracias a Dios, que se está llevando a cabo entre las cabezas pensantes del Partido Popular, mejor dicho entre la presidenta de la Comunidad madrileña, Isabel Díaz Ayuso, y el denostado Pablo Casado, con acusaciones cruzadas de espionaje y de beneficios en la compra de mascarillas por familiares dejando al PP en una difícil situación. Ayuso dice que ella lo que quiere es ser la presidenta de la comunidad madrileña, mientras una gran mayoría miran para el gallego Alberto Nuñez Feijóo, como tabla de salvación, contestando con una claridad manifiesta, para que no quepa lugar a dudas, lo siguiente: que ni si ni no, sino todo lo contrario. Galicia es mucha Galicia para dejarla en otras manos, pero España entera merece correr el riesgo dicen en el PP. Mientras tanto la sombra de Ayuso vuela por aires, por si las moscas o moscones. A los descerebrados que sueñan con guerras y que les cantaba la chirigota de Cádiz ‘Los profesionales' en los carnavales de 1999: No me pegues tiritos en el pecho, pégatelo tú en el culo que ya está el boquete hecho. NO A LA GUERRA.

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