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Gente en León

un amigo de león

El miedo es libre

Sin quitar un ápice de importancia, que nunca nada tuvo tanta entre los humanos de mi generación como la afectación del maldito ‘coronavirus', no me abstengo a la hora de reflejar algo que causó estupor y sorpresa entre la mayoría de españoles. Hablo de la toma al asalto de los rollos de papel higiénico de las estanterías. Comentando esto con una atenta cajera de un conocido supermercado al ver las estanterías de papel vacías, coincidíamos en lo inexplicable del caso.

Archivado en: Maximino Cañón, coronavirus, bidet, papel de periódico, papel higiénico, estanterías vacías de papel higiénico

Maximino Cañón
20/3/2020 - 01:10

Son tiempos, decíamos, en los que para atender la higiene existen varias alternativa en el caso de no tener los rollos que, de manera habitual, utilizamos en nuestro quehacer diario. Desde la utilización del bidet, (accesorio del cuarto de baño para atender las partes pudendas), hasta el socorrido papel de periódicos etc., no entendíamos el porqué de la inusitada demanda, cual si de un alimento necesario se tratara. La cosa siguió y la extrañeza también.
A mí, quizás por desconocimiento, me gustaría que me explicaran el porqué, a lo mejor es que desconozco su finalidad. Entiendo más la falta de rollos de papel para secarse las manos, una vez bien lavadas con agua y jabón, o con cualquier producto desinfectante, que los mencionados rollos de papel higiénico. Esto nos retrotrae a los años siguientes a la posguerra en que no se usaba papel en rollo en el inodoro. Entonces el papel del periódico realizaba dos funciones, una la de leer mientras uno (con perdón) evacuaba el vientre en el WC, y la otra, ya se imaginan, para dar por terminado el acto.
En España la ironía, respecto a lo escatológico, siempre tuvo vigencia. En tiempos del dictador, se comentaba en los mentideros, como chiste en secreto, que cuando algún pretendiente se acercaba a pedirle la mano de su hija, éste, al ser preguntado por Franco cómo la iba a mantener y si, después de exponer los medios a su disposición, Franco les decía que con eso su hija no tenía ni para limpiarse el... Con lo cual, los rechazados al ser preguntados cómo les había ido la entrevista, estos dijeron: pues nada, la conclusión que sacamos por lo que dijo su padre es que es una cagona.
Eso no se si se puede extrapolar a estos días con el ‘coronavirus', pero la realidad es que, a la vista del vaciado de los estantes donde normalmente se instala el papel higiénico, no estamos lejos. A ver si logramos la fórmula de acabar con esta pesadilla, que de hacer chistes nos queda mucho tiempo.

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