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Aquellos tiempos del tupé

Cuando paseamos por la ciudad como nunca antes lo habíamos hecho, si descontamos los años de la juventud en la que también por otros motivos propios de los años trillábamos Ordoño II y la Condesa luciendo lo que cada uno o una, podía: luciendo ropa de moda, buen tipo, o desparpajo para el flirteo, descubrimos sin extrañarnos las nuevas modas y costumbres.

Archivado en: Maximino Cañón, pijerío, tupé

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Maximino Cañón
02/3/2018 - 01:10

Desde luego, antes, como ahora, pero con mayores diferencias sociales, también existía el ‘pijerío', definido como "conjunto de jóvenes, generalmente de posición social elevada" o aparentada porque, la mayoría de las veces, no tenían ni para tabaco.
Se proclamaban seguidores de la última moda y con una manera de hablar que, aunque siendo el hazmerreír de la generalidad, les hacía crer que estaban por encima del resto. Quien nos iba a decir que unos pantalones llenos de roturas serían los que en el futuro marcarían, junto con los tatuajes, tendencia entre la ‘vasca' joven. En cada época hay alguien que impone modas a seguir. Los años establecían los límites. A los más pequeños rara vez se les permitía estar con los mayores, aunque la diferencia fuera sólo de uno o dos años. Estos, al estar ya en edad de ver en las chicas algo más que simpatía y compañerismo, y con la líbido a flor de piel, se esmeraban en llamar la atención del género femenino. Con tal motivo se acicalaban procurando tener una buena puesta a punto para impresionar en los encuentros ¿casuales?, destacando lo mejor que cada uno tenía. A los aspirantes a ser mayores nos llamaba la atención el tiempo que le dedicaban a hacer el ‘tupé' en el pelo, que era como la prestancia en la avanzadilla, lo cual, después de varias intentonas, y una vez impregnado el cabello con brillantina, se lograba asentar el ansiado peinado con ‘tupé' .El remate final se conseguía dándole con la mano ligeros empujes en la base del pelo hacia delante, hasta que este adquiría una posición fija. Por eso cuando hoy observo como los jóvenes de ambos sexos llevan el pelo como les viene en gana me viene a la memoria, y me rejuvenece, el pensar que la frase atribuida al Rey Salomón por vez primera, de que "no hay nada nuevo bajo el sol" o el dicho popular de "a todo hay quien gane" sigue tendiendo vigencia. No hay más que salir a la calle, mirar y disfrutar y si no, que se fijen en el cantante 'Pitingo'.

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