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Gente en León

un amigo de león

Los listos de las pelotas

¿A lo mejor es que hacen falta más inspectores de Hacienda y menos políticos? Esta conversación la escuché mientras tomaba un café en un céntrico establecimiento hostelero de nuestra capital. En ese momento, casi sin querer, me quedé pensativo hasta saber que hablaban de los supuestos fraudes que algunos denominados ases del fútbol han cometido a la hora de declarar por los ingresos que perciben de sus clubes.

Archivado en: Maximino Cañón, sueldos de los futbolistas

Maximino Cañón
23/12/2016 - 02:20

¿Cómo es posible que perciban las astronómicas cantidades que a ciertos jugadores de fútbol se les pagan, sin que los aficionados al mismo no sean los primeros en reclamar el cumplimiento con la legalidad y con las obligaciones a la hora de cumplir con la Hacienda Pública? Me causa extrañeza observar a muchos aficionados al fútbol, justificando el cobro de las citadas percepciones, diciendo: "es que dan mucho que ganar". Y digo yo: ¿cuánto tendría que ganar un profesional de la medicina (por ejemplo) por las vidas que salva cada día, un miembro de los cuerpos de seguridad, un bombero o cualquiera que arriesgue su vida por los demás por un sueldo simplemente digno? Son tiempos de solidaridad en los que el que más cobra (verán que no digo gana), por derecho y conciencia, más tiene que pagar. Ojalá, dice la mayoría, tuviera yo esos millones de escándalo que otros tratan de evadir. Es fácil ser solidario o caritativo cuando el dinero te sale por los ojos. Tiene más mérito la humilde limosna de quien vive con lo justo, que lo que pueda publicitar un millonario con alguna obra de caridad, a veces para tapar una mala imagen.
Otros sacan pecho culpando al erario público diciendo: "con lo que a mi me descuentan comen unos cuantos". Si pensaran lo que dicen no osarían hacer semejante afirmación., ¿o es que a ellos el dinero les cae del cielo? A muchos de esos habría que decirles: ya sé, como el mercado, en este caso del fútbol, es el que manda (aunque existan deudas multimillonarias) pues a ‘tocarse las pelotas', del balompié me refiero.
Quiero terminar esta columna con una estrofa que el gran poeta andaluz Juan Carlos Luna 1890-1965 incluye en el famoso poema El Piyayo, inspirado en un célebre y humilde personaje malagueño: ¡A chufla lo toma la gente¡... ¡A mí me da mucha pena y me causa un respeto imponente! Pues a mi también estas noticias lo que me dan es un cabreo imponente.
¡¡Felices fiestas!! Y ya se sabe: "Vale más pasar una noche buena que varias Navidades".

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