Apuntes de una alcaldesa El negocio de la basura (1)
La basura, ese conjunto de residuos y desperdicios, se está convirtiendo en uno de los negocios más rentables y fructíferos del momento. Según los datos estadísticos producimos 575 kg. de basura por habitante al año, cifra que con el paso del tiempo en lugar de descender, se incrementa.
Ana Isabel Ferreras / alcaldesa de Gradefes
03/10/2013 - 01:10
La basura, ese conjunto de residuos y desperdicios, se está convirtiendo en uno de los negocios más rentables y fructíferos del momento. Según los datos estadísticos producimos 575 kg. de basura por habitante al año, cifra que con el paso del tiempo en lugar de descender, se incrementa.
Actualmente, entre los envases alimentarios tan sofisticados y tan de diseño algunos, los vidrios y latas de las bebidas, y los desechos orgánicos, podemos afirmar que entramos en casa cargados de bolsas de la compra y casi a la par, salimos con las mismas a llenar los contenedores multicolor que adornan nuestras calles. Esos contenedores que nadie quiere tener al lado de casa, pero que todos reclaman cuando les queda lejos y tienen que caminar algunos metros (si no te lo cambian de sitio y lo plantan a la puerta de otro vecino, con nocturnidad y alevosía).
Detrás de todo este complejo mundo existe un entramado bien organizado y montado para convertirse en un negocio redondo y del todo legal. Como nadie quiere la mierda cerca, y apelando a la responsabilidad ciudadana, se aprueban unas tasas para que cada vecino pague una cantidad anual a una empresa, de ésas que llaman consorciadas, (en León hablamos de GERSUL), por el tratamiento de residuos respetando el medio ambiente. Pues bien, nos venden la moto con la separación de basura y el reciclado tan necesario y nos encontramos con cantidad de pueblos que siguen teniendo un solo contenedor, con lo que no pueden reciclar, y otros que sí disponen de sistema de separación y además lo cumplen a rajatabla. Pero resulta que en el mundillo de la gestión de residuos, todos los bichos somos iguales y paga lo mismo el del pueblo con un contenedor único, que el que dispone de diferentes y a colorines,…. ¡eso si paga! que los censos en muchas ocasiones tampoco cuadran.
Empezamos bien…. esto ya no es lo mismo queridos súper gestores. Y lo acabamos de rematar hace unos días cuando se ha comprobado con análisis contrastados, que el tratamiento que recibe la basura para convertirla en compost útil para la agricultura, no es más que mierda mezclada malamente y con poco rigor. ¿Se dan cuenta de que además de sacar dinero fácilmente al ciudadano nos están mintiendo?. Y todo ello conocido y consentido por nuestros responsables políticos que siguen mirando para otro lado, vendiéndose por mantenerse en la asamblea de Gersul por 300 €/sesión. ¡No hay que acercarse al cubo para ver tanta basura junta!