martes, 30 de julio de 2024 20:26 www.gentedigital.es facebook twitter

Gente en Leganés

Logotipo diario gente
Kiosko. Portadas de periódicos

Voluntarios que hacen el ocio más fácil

La Asociación Yuna quiere que estos chicos y chicas pasen su tiempo libre disfrutando como los de su edad y para ello organizan salidas a ‘pubs' y teatros y se van de vacaciones a la playa

Archivado en: leganés, yuna, asociación, discapacitados

aumentar texto reducir texto imprimir enviar noticia comentar

gentedigital.es/M. Pacheco
24/1/2014 - 09:02

Son las seis de la mañana cuando cada día suena el despertador en casa de Alejandro, un chico de 16 años con ceguera total y un retraso madurativo. Sus padres, Rafi y José Luis, saben que en cuanto suena ese ‘ring', tienen una larga jornada por delante.

"Todos las mañanas le llevo en coche hasta Plaza Elíptica para coger el bus, porque la ruta del colegio no pasa por Leganés", explica Rafi. "Después vuelvo a trabajar y cuando salgo voy directa a buscarle porque, si no, no hay tiempo para las actividades que realiza entre semana", añade.

Cuando sale del ‘cole', Alejandro y su madre van directos a un centro donde le enseñan solfeo. Después, toca piscina. Llegan a casa todos los días sobre las 20 horas. "Y si no, son clases de piano en la Escuela de Música, o cita con una terapeuta ocupacional que le ayuda a desarrollar su autonomía, o sesiones de fisioterapia que le ayudan a mejorar su estado físico. De lunes a viernes es un no parar", admite.

ASOCIACIÓN DE TIEMPO LIBRE

"Por eso comenzamos a buscar una asociación que pudiera darnos un poco de aire a los tres", cuentan Rafi y José Luis.

Y así, preguntando por aquí y por allí, dieron con Yuna, una joven asociación que nació en Leganés hace cinco años, con el propósito de presentarse como una alternativa de ocio y tiempo libre para personas con cualquier tipo de discapacidad intelectual.

"Todos los sábados dejamos a Alejandro con los monitores y podemos quedarnos tranquilos, porque sabemos que nuestro hijo se queda contento y ellos se desviven. Así, nosotros tenemos unas horas para quedar con los amigos, tomar algo o simplemente, descansar", cuentan. "También es necesario tener un tiempo para la pareja y desconectar", añaden.

Maribel Sánchez, de 33 años y profesora de Educación Infantil es una de las coordinadoras. "Nuestra intención es que los chavales disfruten del sábado como cualquier otro chico de su edad", afirma. "Por eso no hacemos talleres, si no actividades de ocio. Cosas que a todos nos gustan cuando tenemos un tiempo libre con los amigos", declara. "Una vez al mes vamos a un pub con karaoke, que es lo que más demandan los chicos. También hacemos deporte, musicoterapia o salidas al teatro", añade.

UN LOCAL PARA ESTOS CHICOS

Además, Yuna también organiza un par de salidas al año a un albergue, y en verano se marchan de vacaciones a la playa.

"Alquilamos una casa con piscina y esos días no hay horarios. Los chicos proponen lo que les apetece hacer y mientras unos cocinan, otros organizan el día", explica. "Pero tenemos que hacerlo todo en la calle", cuenta Maribel, mientras recoge las zapatillas en la bolera para todo el grupo, pues este sábado toca ‘echar unos bolos', una de las salidas favoritas de los muchachos.

"No tenemos un sitio físico para hablar con los padres o hacer reuniones. Tenemos que hacerlo en bares, cuando sabemos que hay muchos locales vacíos que podríamos utilizar", asume. "Cada uno de los voluntarios tiene sus motivos para estar aquí. A mí, personalmente, me ha cambiado la vida, porque al estar con gente así, que te necesita de verdad, tus problemas diarios se hacen mucho más pequeños", reconoce la coordinadora de la asociación.

Maribel cuenta que todos los monitores son voluntarios. "Ocho fijos y hasta quince en cada salida", explica. "Cada uno se hace cargo de tres o cuatro niños. Yo soy maestra, pero también hay policías, bomberos o informáticos", afirma.

Y una se autofinancia con las cuotas mensuales de cada socio y, además, reciben al año una pequeña subvención del Ayuntamiento y la Junta de Distrito de La Fortuna.

Esperanza y Elena son dos hermanas de 19 y 21 años, respectivamente, que llevan apenas dos semanas participando con la asociación. "Con los recortes que están haciendo no nos cuesta nada quitarnos un poco de nuestro tiempo para estar con ellos. Los chavales se portan muy bien y es algo mutuo. Nosotras ofrecemos algo, pero también recibimos mucho y eso merece la pena", afirman.

 

añadir a meneame  añadir a freski  añadir a delicious  añadir a digg  añadir a technorati  añadir a yahoo  compartir en facebook  twittear 
Gente Digital en Facebook

Grupo de información GENTE · el líder nacional en prensa semanal gratuita según PGD-OJD
Desarrollado por Tres Tristes Tigres