La navidad está ya a la vuelta de la esquina, y con ella vuelven los villancicos, los entrañables encuentros con la familia alrededor del árbol y los momentos mágicos que no se olvidan. Pero también viene con la otra cara de la moneda. Los excesos en grandes comidas y la tentación en forma de dulce pasa a ser el pan de cada día, con lo que cuidar y mantener la figura se convierte en una auténtica misión imposible.
La nutricionista Terica Uriol, creadora de la conocida y saludable ‘Dieta del bocadillo’, con más de 20 años en el sector que avalan su eficacia, ha confeccionado para GENTE un menú navideño, muy fácil y sencillo de cocinar y con el que estas comidas familiares no supondrán un dolor de cabeza ni unos kilos de más en la báscula. Y es que sano, delicioso y económico son tres términos que pueden ir en una misma frase y no tienen por qué estar reñidos, según se desprende de las palabras de la reconocida experta en alimentos.
ENTRANTES
Canapés de atún y pimientos, de salmón y queso light o de jamón ibérico con tomate (sin tocino) son una buena forma de empezar el banquete. Para continuar, salpicón de marisco y una buena ensalada. Uriol recomienda una mezcla de hojas verdes como rúcula y canónigos, piña, maíz y salsa rosa baja en grasa. El toque estrella, unos langostinos que no engordan pero eso sí, hay que evitar chupar la cabeza, ya que en este punto se condensa todo el ácido úrico.
SEGUNDO PLATO
La especialista, licenciada en Farmacia y Tecnología de los Alimentos, aconseja cambiar el cordero por otros platos más ligeros como un delicioso pescado blanco cocinado al horno o a la sal, o una sabrosa pularda, siempre y cuando esté preparada con poca grasa. Para acompañarlo, una guarnición de verduras cocidas o una pequeña porción de patatas panaderas.
POSTRE
Y por fin, el más temido de la velada, el postre, para el que también hay alternativas más sanas como una fuente de frutas exóticas. Para darle un toque especial, la fruta puede estar cortada en forma de carpaccio (rodajas muy finas), en brocheta o si no escarchadas. Según Uriol, hay que evitar dulces como el mazapán y los polvorones, o al menos, consumirlos en pequeñas dosis. Tampoco hay que abusar del turrón. Si se toma, se recomienda el duro, porque según la nutricionista es el que menos engorda, ya que está compuesto de almendra y azúcar. También advierte sobre los peligros del turrón ‘sin azúcar’, que se debe evitar, a menos, que la persona sea diabética, ya que su porcentaje de grasa es muy elevado.
Por último, cuidado con el alcohol. Siempre con moderación y con un vaso de agua al lado para que se diluya en el organismo.