La XXXI edición de Fitur, que se celebra en en el madrileño reciento de Ifema parece haber cumplido tanto las expectativas de la organización, con una superficie contratada de 75.000 metros cuadrados (10 pabellones), como las del sector que, animado por la recuperación del turismo, ha acudido con 10.500 empresas a una nueva edición, marcada por el regreso de Iberia, Amadeus, Accor, Barceló y la compañía de alquiler de vehículos National Atesa, tras dos años de ausencias.
El certamen ha vuelto con un espacio expositivo similar (-1,2%), una participación empresarial algo mayor (+2%), pero menor presencia institucional, aunque estarán todas las comunidades autónomas. Se prevé que pasen por la feria 200.000 visitantes, con lo que el certamen tendrá una repercusión “importante” en ingresos de entre 160 y 180 millones, según las estimaciones de Ifema.
“En términos numéricos y cuantitativos será similar a la de 2010, pero se ha reforzado su carácter profesional y cualitativo”, ha asegurado la directora de Fitur, Ana Larrañaga, en una entrevista a Europa Press. También estarán presentes Globalia, a través de su cadena hotelera, y Orizonia, con su nueva división de touroperadores, denominada Smilo.
“El turismo está en un cambio de tendencia positivo que ha propiciado que las empresas consideren dentro de sus estrategias de marketing participar de nuevo en la feria como una vía para lograr sus objetivos de negocio, decisión que han tomado en un contexto mucho más favorable que el de la pasada edición con perspectivas de cerrar 2010 en positivo y mejores indicadores para 2011”, explicó Larrañaga.
No obstante, “ha habido destrucción de empleo, empresas turísticas y agencias de viajes que han cerrado, no sólo en España, sino a nivel internacional, y eso también se ha notado”.
Para animar la participación en el certamen, este será el tercer año que Fitur congela sus tarifas, medida que “ha dado resultado”, con la vuelta el año pasado de las empresas de ‘rent car’. “Hemos mantenido los precios, pero además hemos aplicado un descuento del 10% por pronto pago”, apuntó la directora. Esta circunstancia ha repercutido en los ingresos de Fitur. “Estamos ingresando menos, en otras ediciones alcanzamos los 100.000 metros, frente a los 75.000 actuales, y mantener los precios en tres ediciones y aplicar un descuento del 10%, supone menores ingresos”, reconoce Larrañaga.
Así, Fitur ingresará cerca de 14 millones de euros, una cifra ligeramente inferior a la del año pasado, si bien los descuentos aplicados y, ya previstos, incidirán “como mucho” en un 5% de los ingresos totales.
Teniendo en cuenta esto, la organización de Fitur intenta “hacer más con menos” optimizando los procesos de gestión que permitan ofrecer más prestaciones e incluir más novedades, incluso con desarrollos informáticos que implican “costes muy altos” pero que se amortizan “muy rápido”. “Más efectividad y reducir los márgenes de costes, exactamente lo que están haciendo las empresas”, apuntó.
Estas medidas de ahorro se han notado en la representación institucional, ya que todas las comunidades estarán presentes “con ciertos ajustes poco relevantes”, municipios y patronatos con stand propio en otras ediciones se han integrado en los pabellones oficiales de sus respectivas comunidades buscando menores costes “habida cuenta de los apuros económicos que sufren”. En lo que respecta a la presencia internacional, acuden por primera vez la República del Congo y Pakistán, además de las nuevas representaciones oficiales de Nueva Zelanda, Líbano y Sudáfrica. Además, la región Centroamerican aha aumentado su presencia un 24% con respecto a la edición pasada. Entre las ausencias, Haití que ha desestimado acudir ante la situación que vive el país.
Fitur estrena también blog, un espacio abierto a la participación de todos los agentes implicados con esta industria, en la edición más interactiva.