El Consistorio presenta el Plan de Calidad del Aire, que fomentará el uso de la bicicleta y del transporte público. Antes de instaurar medidas concretas se elaborará un estudio para analizar de dónde proviene la contaminación.
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Los vehículos pesados no podrán circular por el interior
D. Nebreda
01/4/2022 - 00:42
Coslada es, junto con Granada y Mollet del Vallés (Barcelona), la ciudad más contaminada de España. Su cercanía a Madrid y al aeropuerto de Barajas, y el Puerto Seco, por donde discurren cientos de camiones al día, hace que encabece esta clasificación por delante de las grandes ciudades españolas pese a contar con 81.000 habitantes. El municipio registró en 2021 una concentración anual de 39,16 de dióxido de nitrógeno (NO2), según los datos del Observatorio de la Sostenibilidad. El valor que la Organización Mundial de la Salud considera seguro es de 10 microgramos por metro cúbico. Por encima de ello existe el riesgo de sufrir enfermedades pulmonares obstructivas y cardiovasculares, entre otras.
Para intentar paliar la situación, el Ayuntamiento de Coslada ha diseñado una Zona de Bajas Emisiones (ZBE). Esta área delimita toda la parte de viviendas de la ciudad, excluyendo al polígono industrial. De esta manera, hará frontera en Santa María de la Cabeza, José Gárate, La Cañada, la avenida del Esparragal y Manuel Azaña. En su interior habrá un control de acceso, regulado con sistemas digitales, además de la correspondiente señalización y paneles informativos. Irá acompañada de la ampliación de las infraestructuras ciclistas, el desarrollo de una red de caminos peatonales y el fomento del transporte público. Por el momento, se ha definido que los vehículos pesados y los que su destino no sea el interior de Coslada sean desviados por las vías externas del municipio. Aún se desconoce la fecha exacta de su puesta en marcha.
ARGUMENTOS
El concejal de Política Ambiental, Julio Huete, explicó durante la presentación del Plan que "el diseño de la ZBE será justo y basado en un concepto avanzado. No se va a dirigir a la introducción de peajes, sino a integrar medidas de apoyo para transformar el viario interior como la reducción de la velocidad, la instalación de elementos urbanos, la mejora de la seguridad vial o la redistribución del espacio".
Por su parte, el alcalde, Ángel Viveros, hizo hincapié en que el documento "no se queda en conjeturas, sino que es concreto y tiene un objetivo de mejora muy evidente de los parámetros que marca. Al fin y al cabo, hablamos de calidad del aire y, por lo tanto, de la calidad de vida de los vecinos de Coslada".
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