El regidor colmenareño, José María de Federico ha hecho esta mañana un balance económico al frente de su etapa en el Ayuntamiento de la localidad. El Alcalde ha destacado que se ha pasado de tener una deurda de 2.491 millones de pesetas en 1995 a dispononer de un remanente positivo de 6.8 millones de € en 2010.
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gentedigital.es
29/3/2011 - 13:39
El Alcalde de Colmenar Viejo, José María de Federico, ha destacado el gran salto cualitativo de las arcas municipales desde que él está al frente del Ayuntamiento de la localidad ya que "en 16 años hemos pasado de tener una deuda de 2.491 millones de las antiguas pesetas a disponer de un remanente positivo que alcanza los 6.881.086,70 euros".
"Somos de los pocos municipios que tienen remanente positivo y creo que ésto es un hito en esta época de crisis que vivimos. No sólo hemos conseguido salir del agujero económico en el que nos dejaron los gobiernos locales socialistas que me precedieron sino también crecer año tras año hasta lograr tener, actualmente, unas cuentas municipales saneadas, deuda 0 a corto, medio y largo plazo y, lo más importante, un remanente positivo de Tesorería que nos permite pagar puntualmente a obras y proveedores y afrontar la crisis durante unos años con tranquilidad si se mantiene el control del gasto", ha explicado el Alcalde colmenareño.
El Regidor José María de Federico ha realizado estas declaraciones durante la rueda de prensa ofrecida esta mañana a los medios de comunicación para explicar la actual situación económica del Ayuntamiento y el balance económico de sus 16 años al frente del Consistorio.
Tal y como ha explicado, cuando él tomó posesión como Alcalde de Colmenar Viejo, en junio de 1995, se encontró con "una difícil situación económica", razón por la cual se encargó por concurso un análisis de la situación a la empresa Arthur Andersen. El resultado de ese estudio fue "demoledor":
El Ayuntamiento soportaba en ese momento unos préstamos a largo y medio plazo de -941 millones de pesetas; préstamos a corto plazo (operaciones de Tesorería) de -440 millones de pesetas y un remanente negativo de -719 millones de pesetas. A eso había que añadir deudas atrasadas por obras realizadas sin consignación presupuestaria de -320 millones de pesetas y una sentencia de devolución al Banco Hipotecario de una licencia ilegalmente cobrada de un edificio en Tres Cantos cuando éste pertenecía a Colmenar Viejo que tenía que restar a las arcas municipales otros 71 millones de pesetas.
"La conclusión literal del informe de Arthur Andersen era contundente: la situación económica del Ayuntamiento de Colmenar Viejo es técnicamente de suspensión de pagos como consecuencia, fundamentalmente, de las condiciones en que se realizó la segregación del Ayuntamiento de Tres Cantos en el ejercicio 1991", recuerda el Regidor colmenareño.
José María de Federico manifiesta que "a ese grave problema económico se sumaba la gran escasez de dotaciones educativas, culturales, deportivas, de infraestructuras, de parques, etc. que padecían los vecinos".
Tras un intenso y continuo esfuerzo, en el año 2000 se consiguen nivelar las cuentas municipales y reflotar las arcas municipales. "A partir de ese momento y gracias a una buena gestión, en la que la política de contención del gasto ha sido la prioridad, hemos llegado a la situación actual: un Ayuntamiento con un remanente positivo de 6,8 millones de euros y un presupuesto para este año 2011 de 33.719.185 euros".
Pero si algo distingue al presupuesto de este año es que nace sin el lastre de un aspecto tan importante para todo ayuntamiento como es el endeudamiento. Y es que el año 2010 marca el fin del endeudamiento a largo plazo del Ayuntamiento de Colmenar Viejo. Dicho de otra forma: la amortización total de la deuda a largo plazo dentro del Plan Económico-Financiero ha supuesto el pago de más de 3.500.000 euros y con ello la eliminación de toda la deuda histórica del Ayuntamiento.
El Regidor colmenareño hace hincapié en "las grandes inversiones que se han realizado a lo largo de estos años, muy necesarias, sin cargarlas al contribuyente, bien planificadas y que permiten dar un mejor servicio y calidad de vida a los vecinos. Esta planificación y control del gasto nos permiten hoy no tener ninguna deuda ni a corto ni a largo plazo y pagar a los proveedores puntualmente, siendo Colmenar Viejo un ejemplo en unos momentos en los que muchos ayuntamientos están en quiebra".
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