Los participantes festejaron el fin de año con bolsas de cotillón y doce minigalletas Oreo que sustituyeron a las tradicionales uvas para las campanadas de salida de la popular carrera.
gentedigital.es
01/1/2016 - 11:14
La mañana del 31 de diciembre se vivió una carrera de colores diferente en Boadilla del Monte. La cita final de la Gira Holi Run 2015 despidió el año con la New Year Edition, una edición limitada que contó con la participación de miles de holirunners que acudieron a la llamada de las pre uvas, pues la salida de carrera estuvo marcada de una forma similar al tradicional cambio de año.
Cada asistente recibió una bolsa con doce mini galletas Oreo para tomar con las doce campanadas que marcaban al mediodía la salida de esta peculiar San Silvestre. En un día tan especial, la organización obsequió con una bolsa de cotillón a cada participante, proporcionando así un ambiente increíble al recorrido de la New Year Edition.
Tras la salida, a los runners les esperaban cinco kilómetros con estaciones Holi Blitz cada mil metros, los check points naranja, azul, verde y rosa; donde recibían un baño de color, llegando a meta cubiertos por una tonalidad multicolor.
Pero el evento no acabó con la carrera, pues tras llegar a meta y recibir el avituallamiento, era el momento más fiestero de la jornada. Varias horas de música, baile y toneladas de polvo de color en el aire fueron la despedida ideal para un 2015 repleto de eventos en los que han participado más de 110.000 corredores en diferentes puntos de España.
LA 'HOLI BOOM'
La fiesta estuvo animada por el cuerpo de baile y el DJ residente de Holi Run, Ben Hassel. El instante más fotografiado del evento es siempre el Holi Boom, el lanzamiento colectivo de polvos de colores, un momento mágico en el que los participantes y los voluntarios convirtieron el cielo de Boadilla en un particular arco iris, que denotaba que esta carrera era una San Silvestre fuera de lo común.
Entre los corredores no faltaron los que acudieron disfrazados, dando así un toque de color más notorio al trazado boadillense. Además, esta época del año invita a protegerse del frío, por lo que fueron muchos los que optaron por acudir con disfraces sobre la ropa deportiva.
En relación a las prendas, el evento contó con un guardarropa en la zona de salida-meta, cuya recaudación iba destinada a beneficio de ADETCA (Asociación en Defensa de la Atención a los Pacientes con Trastornos de la Conducta Alimentaria).
LA EXPERIENCIA SEGÚN LOS HOLIRUNNERS
Los participantes demostraron su júbilo, así lo recogen las declaraciones de varios de los corredores presentes. Para Lidia González "la carrera es súper divertida y la fiesta posterior una pasada. Es la primera vez que vengo y seguro que repito en otras ediciones". Otros se desplazaban en grupo con idéntico disfraz, como Manolo y Juan Luis, quienes indicaban que "somos cuatro chicos que venimos de Madrid, todos vestidos de superhéroes y a tomarnos las pre uvas con la Holi. Está todo muy bien".
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