Aprobada la creación de una mesa de diálogo sobre la autovía A-5
La instalación de semáforos en la primera fase de su transformación en vía urbana se producirá en enero, con independencia de que haya salido adelante la propuesta
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"El PP presentó una PNL a la asamblea para pedir su suspensión
29/11/2018 - 20:39
La insatalación de semáforos en la autovía A-5 puesta en marcha por Ayuntamiento de Madrid sigue generando controversia. Si a principios de semana el secretario general del PSOE-M, José Manuel Franco, lo tachó de "proyecto personalista y electoralista", mostrado su "rotunda y contundente oposición" a que se llevase a cabo sin que hubiese un consenso claro entre las administraciones afectadas, tras reunirse con los alcaldes socialistas de los municipios por los que pasa la autovía de Extremadura (Móstoles, Navalcarnero, Moraleja de Enmedio, Villamanta y Villanueva de Perales) su partido presentó una proposición en el Pleno de Cibeles en la que pidieron al equipo municipal "un alto en el camino".
Los socialistas querían que se crease una mesa del dialogo donde estuviesen representados los ejecutivos central y regional, y todas las localidades del sur y del oeste, con el objetivo de "dar alternativas de movilidad a las personas que todos los días pasan por la A-5". La iniciativa, que salió adelante con el apoyo de Ahora Madrid y el rechazo de PP y C's, no cambiará, en principio, los plazos previstos para la ejecución del proyecto. El delegado de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento de Madrid, José Manuel Calvo, se reafirmó en lo dicho por su grupo, anunciando que la primera fase de la transformación de la A-5 en vía urbana se producirá en enero. La instalación de estos dispositivos de señalización luminosa encargados de regular el tráfico en la autovía de Extremadura a su paso por Madrid, permitirá a los vehículos incorporarse desde la Vía de los Poblados a la M-40. En una segunda fase, el objetivo es que se coloquen en los cruces con el fin de permitir que los vecinos del distrito de Latina puedan cruzar a nivel.
INICIATIVA
No obstante, la mencionada medida socialista contempla el desarrollo de alternativas que permitan un desarrollo "eficaz, integral y acordado del proyecto". También recoge la necesidad de instar al Consorcio Regional de Transportes y al Ministerio de Fomento para que lleven a cabo un estudio completo de la movilidad del transporte público y privado en la zona afectada por el plan.
Por su parte, el Partido Popular también dio un paso más en sus reivindicaciones, después de haber anunciado que estudian judicializar el caso, registrando una Proposición No de Ley (PNL) en la Asamblea de Madrid en la que se pide la suspensión "inmediata" de la instalación de los semáforos en la A-5, algo que antes que ellos ya hizo Ciudadanos en este mismo hemiciclo. Los populares insistieron en que esto provocará un aumento del 350% en los atascos.
El Ayuntamiento de Alcorcón anunció, además, que solicitará la instalación en la A-5 de medidores de contaminación para "verificar" si los atascos que, según estima, "van a producirse" con la instalación de semáforos que planea el Consistorio de Madrid tienen "un efecto directo sobre el incremento de polución".
En este sentido, el Gobierno local de Alcorcón quiere que se coloquen en el límite de la autovía con el término municipal de Madrid y, en el caso de que las lecturas sean altas, estudia presentar una querella contra el Ayuntamiento de la capital por esta medida "arbitraria y unilateral".
"Se incurrirá en una grave responsabilidad si se activa los semáforos, habida cuenta de que el propio Ayuntamiento de la capital ha reconocido que esta medida provocará un aumento del 350 por ciento en los atascos en la A-5 y, en consecuencia, un aumento de las emisiones contaminantes derivadas de los mismos", explicó el alcalde de Alcorcón, David Pérez.
Esto, según subrayó el primer edil, incidirá directamente "en la salud de los vecinos de Batán, Campamento o Cuatro Vientos" y en el millón de vecinos del Sur que se desplazan diariamente al centro, para quienes además supondrá tener una "barrera" con la capital.
"En resumen, los semáforos significarán más atascos y, por tanto, más contaminación y más riesgos para el medio ambiente y para la salud de los ciudadanos, y hay una responsabilidad directa en las decisiones que está adoptando el Ayuntamiento de Madrid", ha incidió
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