Mi mujer vendió sus esposas de oro
En realidad no tengo mujer, y las esposas de oro bien me gustaría haberlas tenido, pero sí que veo a muchas personas que en los últimos meses están empezando a empeñar sus objetos más valiosos.
Al ser el oro, por encima de las viviendas, lo de más valor que tienen los hogares españoles, independientemente de su clase social, cada vez más personas empiezan a empeñar sus objetos de oro.
Me llamó mucho la atención el artículo de los 10 artículos empeñados más curiosos. Había visto a amigos vender sus joyas de oro, algún que otro reloj, monedas viejas y cucharillas de café que tiempos antes habían comprado en esas reuniones en las que te intentan vender “lo que sea” y a las que vas porque te regalan una botella de aceite o un jamón.
- Esposas de oro. No resulta difícil imaginar para qué se utilizaban hasta ahora.
- Palo de esnifar coca de oro.Su nombre lo dice todo, pero si alguien me dice que este objeto existe ¡no me lo creo!
- Boquillas de oro.Es momento de renovar los instrumentos musicales con complementos menos lujosos
- Petacas de oro. Anteriormente se utilizaban mucho las petacas para llevarse sus bebidas alcohólicas a cualquier lado, ahora no se utilizan tanto… Y las de oro ya empiezan a ser empeñadas.
- Carteras de oro. Ahora en las fiestas tendrán que lucir otros complementos, porque muchas mujeres se están deshaciendo de sus carteras más especiales
- Mecheros de oro.Lejos de perder su valor en momentos en que no se puede fumar en muchos sitios, muchos los empeñan para ganar algo de dinero
- Dientes de oro.Esperemos que no hayan tenido que empeñarlos para comer
- Bolígrafos de oro. Tiempo atrás un regalo muy especial, ahora hay que prescindir de los detalles para conseguir algo de dinero
- Lingotes y monedas de oro.Elementos que nunca perderán su valor tienen que ser vendidos para obtener dinero en efectivo
- Cucharillas de café. Cuando antes se utilizaban para obsequiar con un café a los invitados más especiales, ahora se empeñan en sitios compro oro.
En esta lista podemos diferenciar tres tipos de artículos que se están empeñando: los que merece la pena empeñar pese a que seguirán subiendo de valor (como los lingotes y monedas de oro), los objetos comunes que en otros tiempos no serían vendidos (como bolígrafos o cucharillas de café) y los elementos más estrafalarios (como las esposas de oro o el palo de esnifar coca).
Yo pienso que si alguien da el paso de empeñar oro es porque realmente lo necesita, sobre todo si tiene que recurrir a vender sus dientes de oro; aunque empeñar un palo de esnifar coca no debe ser tampoco muy agradable mirar a la persona que tienes enfrente. Sobre todo cuando se vende en tiempos de crisis, en que podemos no esperar tanto dinero por nuestros “objetos más preciados”.
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