Almudena Grandes: "Nguyen Ha pudo tener una vida similar a la mía"
Nguyen Ha ganó su primer premio de Literatura con 15 años, en 9º Grado, reconocimientos habituales también en la juventud de Almudena Grandes. Y a los 24 conoció la maternidad, experiencia que, del mismo modo, comparte con la escritora madrileña. Sin embargo, Ha nunca ha podido publicar novelas tan exitosas como 'Las edades de Lulú', debut de Grandes allá por 1989. Porque Ha es una de esas mujeres a las que un día se les negó la educación.
Ahora, la historia de esta vietnamita de 38 años llega a nosotros a través de la campaña 'Vidas en progreso', impulsada por la ONG Paz y Desarrollo. Mara Torres, Carmen Posadas, Rosa María Calaf, Ángeles Caso y Almudena Grandes han escrito las biografías de Ha y de otras cuatro asiáticas: Angelita Precioso (Filipinas), Rahima Begum (Bangladés), Ith Sopha (Camboya) y Francisca Mónica Da Fátima (Timor Oriental), mujeres anónimas que, pese a haber sufrido serias dificultades y discriminaciones, se han convertido en referentes sociales dentro de sus comunidades e, incluso, de sus países.
Paralelismos
"Si hay una cosa que te enseña la literatura, es que los seres humanos somos básicamente iguales. Lo que explica que nosotros podamos leer hoy El Quijote o La Ilíada y entenderlos y emocionarnos, es que esos libros, escritos en momentos muy distantes, cuentan nuestra propia vida", subraya Grandes, autora del prólogo que perfila la biografía de Nguyen Ha. "En este caso, te planteas a priori que vas a hablar de una mujer vietnamita de 38 años, que vive en un país lejano y en unas condiciones muy distintas a las mías. Pero luego te das cuenta de que, a partir de tu propia experiencia, de la maternidad, del amor, del desamor, de la relación que tú misma has mantenido con tu padre... Resulta que al final entiendes perfectamente lo que ocurre. Más allá del exotismo inicial, Ha es una mujer que ha pasado por lo mismo que tú", añade.
Fue precisamente el padre de Ha el que hizo todo lo posible por que su hija estudiase e, incluso, cuando enfermó se negó a que se quedase en casa cuidándole. Pero, cuando murió, fue su madre la que le prohibió ir a la escuela de talentos literarios donde le habían reservado una plaza. Hallamos aquí el otro gran paralelismo entre Ha y Grandes: su pasión por la pluma. "Ella podría haber tenido una vida muy similar a la mía. Es una escritora frustrada, su gran drama en la vida ha sido que no ha podido educarse. Aun así, es una mujer muy capaz, no sólo de emprender un negocio con éxito, que es lo que está haciendo ahora con la fábrica de pollos que ha levantado", indica la escritora. Por eso, de esta vietnamita ha aprendido la madrileña que en condicones de penuria inconcebibles para nosotros se puede mantener la fuerza para progresar. "Su vida me ha devuelto mucho la experiencia de lo que era España cuando yo era niña, esa forma de convivir con la pobreza con dignidad y orgullo. Ese espíritu no nos debería resultar ajeno, porque vivimos en un país que siempre ha sido pobre, menos en los últimos años, y que siempre ha sabido ser pobre, lo que no hemos sabido ser es ricos, y por eso estamos ahora como estamos", opina.
La campaña 'Vidas en progreso' se incluye en las actividades de sensibilización de dos convenios regionales financiados por la Agencia Española de Cooperación. Una iniciativa que busca rescatar del anonimato a mujeres en el contexto asiático y que deja en blanco las páginas finales de estas biografías. "Espero poder escribir un final feliz, que es el destino supremo de los seres humanos, vivir con paz y serenidad. Ha es una mujer con mucho potencial, una empresaria de éxito, una líder que, además, enseña ahora a otras personas lo que ella ha aprendido", concluye Grandes. Más información sobre la campaña y las biografías en la web Vidasenprogreso.org.
Proyectos desarrollados por ONG's locales
Tanto Ha como el resto de las protagonistas que aparecen en las portadas han crecido gracias a proyectos desarrollados por organizaciones locales. "Les enseñan derechos laborales, políticos, económicos, a montar una empresa, a gestionar su hogar... Y muchas han logrado convertirse en 'lideresas' de grupos de microcréditos", aclara Isabel Fernández, responsable de comunicación de Paz y Desarrollo.
Publicado el 23 de diciembre de 2013 a las 07:00.